EEUU detendrá la entrega a Egipto de tanques, aviones de combate, helicópteros y misiles, así como la ayuda de 260 millones de dólares en efectivo, aunque seguirá prestando apoyo militar a actividades «contraterroristas y de seguridad» en la península del Sinaí.

La portavoz del Departamento de Estado Jen Psaki informó que Washington congelará el envío de «material militar pesado y su ayuda en dinero al Gobierno egipcio a la espera de un progreso creíble hacia un gobierno cívico inclusivo, democráticamente electo y elecciones justas. En una conferencia telefónica con periodistas, funcionarios estadounidenses precisaron que la Casa Blanca detendrá la entrega de tanques M1A1 Abrams hechos por General Dynamics, de aviones F-16 producidos por Lockheed Martin y de helicópteros Apache y misiles Harpoon fabricados por Boeing.

Sin embargo, remarcaron que la suspensión no es permanente y será revisada periódicamente.

El secretario de Defensa de EEUU, Chuck Hagel, llamó al general Abdel Fattah al-Sisi, jefe de las Fuerzas Armadas de Egipto, para comunicarle las decisiones. Hagel subrayó la importancia de la relación EEUU-Egipto.

Desde Malasia, el secretario de Estado, John Kerry, reiteró que Washington mantiene sus relaciones con el país. «El Gobierno interino entiende muy bien nuestro compromiso con el éxito de este gabinete, que queremos ver triunfar, y de ninguna manera esta es una retirada de nuestra relación o una interrupción de nuestro serio compromiso de ayudar al Gobierno», afirmó. Pese a ello, el portavoz del Ministerio egipcio de Asuntos Exteriores, Badr Abdelatty, juzgó «equivocada» la decisión de la Casa Blanca.