Euskaltel Euskadi se despide en el Tour de Beijing, la prueba que cierra el World Tour esta temporada, desde hoy hasta el martes, cuando cubrirá su último día de competición. El equipo naranja buscará su última victoria en China con un ocho formado por Mikel Landa, Juanjo Lobato, Mikel Astarloza, Garikoitz Bravo, Ricardo García, Juanjo Oroz, Pablo Urtasun y Gorka Verdugo.

Será una despedida triste, como ha sido todo lo que ha rodeado al equipo desde que el año pasado se rompió con la Fundación Euskadi y con su filosofía, con la justificación de buscar unos puntos que se consideraban necesarios para conseguir una licencia World Tour para cuatro temporadas.

Luego se comprobó que ni esos puntos eran necesarios -Katusha no quedó fuera del World Tour en un primer momento porque Euskaltel fichara a Chaoufi y compañía- y un año después se demuestra que los puntos del ranking de méritos tienen el mismo valor que la licencia World Tour de Euskaltel. Ninguno. Solo había diecisiete equipos que querían competir en la máxima competición ciclista en 2014 y el Europcar logrará la que queda vacante por la desaparición del equipo vasco y del Vacansoleil sin ni siquiera proponérselo.

A por la segunda victoria WT

Pero no solo ha sido triste este año por la ruptura innecesaria con las claves del éxito, por la despedida o por los fallecimientos de Víctor Cabedo y de Rufino Murgia. A pesar de aumentar su presupuesto en más de dos millones con respecto a la anterior, ha sido la peor temporada de Euskaltel desde que está en la élite, con ninguna victoria de etapa en las tres grandes y solo una en el World Tour, la lograda por Samuel en la Dauphiné.

En la Vuelta el equipo consiguió al menos despedirse en el podio con su primer triunfo en una general colectiva en una grande, y en el Tour de Beijing el objetivo será conseguir la segunda victoria en una prueba World Tour de esta temporada. Para ello intentará buscar la baza de Lobato en las etapas de hoy, mañana y el martes, las más propicias para el sprint. El domingo hay siete puertos y la etapa reina será la del lunes, que presenta dos subidas de Primera y un final en la Gran Muralla China con casi 13 kilómetros al 6% de desnivel, donde la mejor baza naranja sería Mikel Landa.

El alavés participa por tercera temporada consecutiva en el Tour de Beijing y tiene a su favor el conocimiento de la prueba china y el punto de forma adquirido en la Vuelta.

Junto a él destacan en la línea de salida el ganador de las dos ediciones disputadas. Tony Martin -aunque no tendrá una crono para marcar las diferencias-, lo que beneficia a escaladores como Robert Gesink, los australianos Richie Porte y Michael Rogers, el irlandés Dan Martin y el italiano Ivan Basso.

Pero el gran favorito será el campeón del mundo, Rui Costa, que tras su fichaje por Lampre se despedirá de un Movistar que presentará un equipo en el que estarán presentes dos vascos, Enrique Sanz y Beñat Intxausti, junto a Jesús Herrada, Giovanni Visconti, Alex Dowsett, Andrey Amador e Iván Gutiérrez.

No participan los tres primeros del World Tour -Joaquim Rodríguez, Froome y Valverde-, con lo que el catalán volverá a ganar la clasificación individual. Participan los diecinueve equipos World Tour y el Champion System, profesional continental que tiene su sede en Hong Kong y a varios chinos en su plantilla.