GIPUZKOA UPV 63

GRAN CANARIA 72

Siempre hay peajes que toca pagar cuando se estrena categoría. Gipuzkoa UPV lo pagó con sangre, merced a una mala defensa en la primera mitad que le costó verse con una desventaja que llegó hasta los 22 puntos, 34-56. Las de Azu Muguruza sucumbieron ante el descollante físico de Gran Canaria, sobre todo una Astou Ndour que, con 22 puntos y 19 rebotes, le dio la bienvenida a la escuadra guipuzcoana a la máxima categoría.

Las jugadoras que dirige Azu Muguruza apretaron las clavijas atrás después de verlo todo perdido, y cedieron solo 18 puntos a partir del descanso, pero la desventaja era ya insalvable, amén de que, cuando se vieron con posibilidades de remontar, los nervios les jugaron malísimas pasadas, así como el imponente físico de las rivales y las recurrentes defensas alternativas de las entrenadas de Maikel López.

Pero antes de remontar, la situación tenía que llegar a la desesperación. En primer lugar, Gipuzkoa UPV, merced a una Arancha Gómez Novo en su salsa -24 puntos para la base galaica- se adelantaba con un prometedor 23-15 hacia la recta final del primer cuarto.

Pero el cuadro local entró en el primero de sus dos agujeros ofensivos. Gran Canaria se puso a la tarea de enseñarle a su rival que para ganar un partido en Liga Femenina va a necesitar algo más que un buen arranque, y le dio la réplica con un parcial de 0-11, con Chambers erigiéndose en líder de la remontada.

Acto seguido, con el segundo período, llegó el mazazo definitivo. Gómez Novo tiraba de sus compañeras, pero nadie más le acompañaba aún en anotación y la base sumaba demasiadas pérdidas. Además, una errática Yurena Díaz -solo destacó en los triples- dio paso a una Iris Junio que dio nuevos bríos al cuadro grancanario. Todo sumaba para el desastre, de forma que Gipuzkoa UPV encajó un nuevo parcial, esta vez de 1-17, pasando el marcador de 33-37 al 34-54 del descanso. las de Azu Muguruza no eran capaces de parar a una Astou Ndour que, siendo sinceros, su potencial es de WNBA.

La reacción de Toch Sarr

Pero Gipuzkoa UPV no quería bajar los brazos. Después de tantos años intentando sin éxito el ascenso, el estreno en la élite no podía saldarse con una derrota por paliza. Las de Azu Muguruza empezaron a hacerse fuertes en defensa, con Toch Sarr tomando la sartén por el mango, mientras Forasté, Iulene Olabarria o Laura Arroyo empezaban a aportar detalles que, si los confirman con el paso de los partidos, valdrán su peso en oro.

Pero el estreno era ayer, y aunque Gipuzkoa UPV se arrimaba a los siete puntos de desventaja, 63-70 a falta de dos minutos, se les acabó la gasolina. Los nervios, la defensa rival y el esfuerzo por remontar pasaron factura. Bienvenidas a la élite.