Persisten las dudas sobre el asalto del centro comercial Westgate de Nairobi
Cuatro semanas después del asalto al centro comercial Westgate de Nairobi por parte de la milicia islamista de Al Shabab persisten las interrogantes sobre la identidad de los atacantes y el número de víctimas.
GARA | NAIROBI
Las autoridades keniatas encontraron el jueves los cuerpos calcinados de dos personas en el interior del centro comercial Westgate de Nairobi, objeto de un ataque obra de Al Shabaab el mes pasado en el que oficialmente murieron 67 personas. El presidente keniamp, Uhuru Kenyatta, aseguró que no quedaban cadáveres, sin embargo, la Cruz Roja aseguró que 23 personas siguen desaparecidas.
Tampoco se tiene certeza sobre el número exacto de atacantes. Las autoridades dijeron en un principio que podrían ser entre 10 y 15. Sin embargo, investigadores, basándose en grabaciones de las cámaras de seguridad del centro comercial, han reducido estas cifras a 4 o 5.
La cadena británica BBC identificó a uno de los atacantes como Hassan Abdi Dhuhulow, un noruego de 23 años de origen somalí. Las autoridades kenianas dieron a conocer con anterioridad una lista con cuatro nombres, en realidad sobrenombres de guerra, lo que impide saber su verdadera identidad.
Las imágenes tampoco han mostrado a ninguna mujer entre los atacantes. Durante mucho tiempo circuló el rumor, desmentido por la propia guerrilla, de que la ciudadana británica Samantha Lewthwaite, viuda de uno de los kamikazes que participó en los atentados de Londres en 2005, estaba entre los atacantes, cuyo destino sigue siendo un misterio.
Servicios de inteligencia extranjeros indicaron que es poco probable que hubieran podido escapar tras el asalto, tal y como circuló después del ataque.
El presidente Kenyatta afirmó que cinco personas murieron en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. Pero sus cuerpos no han sido encontrados. La zona del edificio donde estaban atrincherados se derrumbó a causa de un incendio provocado por los intensos combates. Sus cuerpos podrían seguir bajo toneladas de hormigón.
Dos semanas después de lo ocurrido en Nairobi, las fuerzas especiales de EEUU realizaron una operación en Somalia contra un supuesto líder de Al Shabab, al que al parecer no lograron capturar.
La Policía ugandesa pidió ayer a la población que extreme la prudencia ante la supuesta amenaza de un ataque en la capital, Kampala, como el ocurrido en el lujoso centro comercial Westgate de Nairobi, frecuentado por occidentales, en setiembre.
«Permanezcan en estado de alerta y vigilen mutuamente sus movimientos y actividades, porque seguimos ante una amenaza terrorista», declaró la Policía ugandesa en su cuenta Twitter.
La Policía hizo esta advertencia después de que Estados Unidos avisara el jueves de que su embajada en el país «evaluaba informaciones que afirman que pronto puede haber en Kampala un ataque como el del Westgate».
Al menos 67 personas murieron en el ataque al centro comercial Westgate en Nairobi a finales de setiembre. El atentado fue reivindicado por los insurgentes islamistas somalíes shebab, que afirman haber actuado en represalia por la intervención militar keniana contra ellos en el sur de Somalia.
Un contingente militar ugandés también participa, dentro de la fuerza de la Unión Africana, en la lucha contra los shebab en Somalia.
GARA