La consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, defendió ayer las ayudas que su Ejecutivo aportó al proyecto del coche eléctrico Hiriko y dijo creer «firmemente» que «tiene futuro» si logra la homologación y llega a la fase de comercialización.

En la comisión correspondiente del Parlamento de Gasteiz, Tapia defendió las ayudas de 2,7 millones concedidas durante la fase de investigación -el Ejecutivo español aportó además cerca de 15 millones-, pero descartó dar ahora más dinero porque corresponde a los promotores privados homologar el coche, presentar un plan de negocio y comenzar su venta.

Una vez en marcha ese proyecto empresarial, dijo la consejera, el Gobierno estaría dispuesto a estudiar su participación siempre a través de capital riesgo.

Sin embargo la situación de Hiriko es muy complicada ya que en mayo entró en preconcurso de acreedores. Señaló que «a día de hoy no hay capacidad financiera suficiente» para acometer la homologación, que es el paso previo para poder comercializar el vehículo eléctrico. En este punto, Tapia desveló el interés de «alguna de las empresas que estaban en el consorcio inicial» de asumir el proyecto, una posibilidad en la que el Gobierno «está trabajando», aunque no dio más detalles.

Mercadona, «bienvenida»

Por otra parte, la consejera contestó a una pregunta de EH Bildu sobre la apertura de 25 tiendas de Mercadona en la CAV y dijo que su Ejecutivo «da la bienvenida» a toda iniciativa que llegue para «crear riqueza y empleo», aunque trabajará para que la cadena valenciana compre a los productores locales.