A cien días del inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014, el donostiarra Paul de la Cuesta es el único deportista vasco acreditado para participar en la cita olímpica que se celebrará en Rusia entre el 7 y el 23 de febrero. El esquiador guipuzcoano va a centrar sus objetivos en las pruebas de Descenso y de Súper Gigante, y aspira a lograr un puesto entre los 15 primeros clasificados.

Paul ha cambiado de entrenador y de preparador físico este año, y en verano ha estado entrenando en Chile y Argentina. En noviembre comenzará a disputar las copas de Europa y del Mundo, con el objetivo de obtener puntos para mejorar los puestos de salida en los Juegos. Su objetivo en la Copa del Mundo será estar entre los 30 primeros en las pruebas de Descenso -la prueba de velocidad por excelencia- y de Súper Gigante -un trazado con curvas-, aunque no descarta participar también en Eslalom Gigante -giros más cerrados- y en Súper Combinada -suma de descenso y Eslalom a dos mangas-.

Cambio de estilo

«Antes tendía a hacer un trabajo casi exclusivamente de fuerza, muy agresivo, y ahora trabajo más la entrada en la curva, que es donde se consigue aprovechar la velocidad y avanzar posiciones. En cuanto a la preparación física, el trabajo es ahora más progresivo y constante, y estoy viendo los resultados», explicaba De la Cuesta a BAT Basque Team tras los tests de fuerza realizados en el centro de Fadura.

El esquiador donostiarra disputará en noviembre dos pruebas de la Copa de Europa en Austria y la Copa del Mundo de Velocidad en Canadá. «Van a ser importantes para conseguir puntos y para llegar en la mejor forma a los Juegos», reconoce De la Cuesta, que quiere centrarse en el Descenso y en el Súper Gigante porque «es donde más he evolucionado y mejores sensaciones tengo».