El neoyorquino Lou Reed murió mirando a los árboles y haciendo una postura de tai chi
El cantante Lou Reed, fallecido el pasado domingo, murió en su casa mirando a los árboles y realizando una postura de tai chi, según explicó su viuda, la compositora y música Laurie Anderson.
GARA | NUEVA YORK
«Lou era un príncipe y un guerrero, y sé que sus canciones sobre el dolor y la belleza del mundo llenarán a mucha gente con la increíble alegría que sentía por la vida», dijo Anderson en un obituario publicado el jueves pasado en el periódico local «East Hampton Star», de la zona de los Hamptons (Este de Long Island, Nueva York).
Anderson, quien desde el fallecimiento del cantante y compositor había mantenido un silencio total, explicó: «La pasada semana había prometido a Lou que le sacaría del hospital y le traería a casa en Springs. ¡Y lo conseguimos!».
Añade que «Lou era un maestro de tai chi y pasó sus últimos días aquí, estando feliz y maravillado por la belleza, la fuerza y la suavidad de la naturaleza».
«Murió en la mañana del domingo, mirando a los árboles y haciendo la famosa postura 21 de tai chi con solo sus manos de músico moviéndose por el aire», agrega Anderson.
El obituario va dirigido «A nuestros vecinos« en esta zona rural, y en su comienzo Anderson explica: «Lou y yo hemos pasado mucho tiempo aquí en los últimos años, y aunque somos gente de ciudad, este es nuestro hogar espiritual».
Reed murió el domingo 27 a los 71 años por complicaciones hepáticas, después de que en mayo fuera sometido a un trasplante de hígado en un hospital de Cleveland (Ohio).