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IV Encuentros de cine y derechos humanos
«La Zona», la catástrofe de Chernobil veinte años después
El Teatro Principal de Donostia acoge hoy, a las 19.45, la proyección de «La Zona», filme documental del que son responsables Carlos Rodríguez y Asun Lasarte, de la productora donostiarra Morgan Creativos. «La Zona» transporta al espectador a Chernobil, veinte años después de la catástrofe nuclear, y lo hace muy especialmente a través de la mirada de tres niños.
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DONOSTIA
El 26 de abril de 1986, un incendio en el reactor número 4 de la central nuclear de Chernobil provocó una fuga radiactiva que afectó especialmente a Bielorrusia, Ucrania y Rusia. Según la OMS, la radiactividad emitida fue 200 veces más que la de las bombas de Hiroshima y Nagasaki juntas. Veinte años después, el equipo de Morgan se ha acercado a la parte más afectada de Ucrania para comprobar cuál es el estado de una cuestión a la que los medios apenas prestan ya atención. «Hablas de Chernobil y parece que te estás refiriendo a la URSS, a algo que no tiene ya vigencia. Y, sin embargo, los problemas derivados de la catástrofe están presentes de forma dramática», indicó Carlos Rodríguez, realizador del filme.La Zona es el espacio inscrito en una circunferencia de 30 kilómetros de radio trazada desde la propia central. En su día fue evacuada y hoy sigue cercada y cerrada a la población. Las cámaras de Morgan han entrado en ella, pero, sobre todo, se han centrado en quienes viven en su entorno, casi cinco millones de personas que no por estar al otro lado de la valla están libres de la amenaza radiactiva. Morgan ha reflejado su situación fundamentalmente a través de tres niños Lidia, Nastia y Andrei, quienes, gracias a Chernobil Elkartea, han visitado Euskal Herria, siguiendo el consejo de la OMS, que recomienda que pasen fuera de las zonas contaminadas al menos cuarenta días al año, con el fin de reforzar sus defensas. «La de los niños es una mirada muy interesante indicó Asun Lasarte, productora del filme. Tienen entre 9 y 12 años, así que no conocieron el accidente, pero viven bajo el estigma de Chernobil, y lo reflejan en sus dibujos, sus poemas y sus sueños».
Tan bonito como inquietante La película trata de abordar la problemática global de quienes viven en torno a la Zona. «Siempre se habla de los problemas de salud, y eso es algo indudable, claro, pero existen otros señaló Rodríguez. De hecho, nosotros hemos evitado deliberadamente entrar en hospitales y reflejar dramas extremos, y hemos preferido centrarnos en niños de familias ‘normales’, con los que el público se pueda identificar más. Y es que, además de problemas de salud, estamos hablando de personas que, por ejemplo, no conocen lo que es una inversión o que incluso pueden ser considerados como apestados por sus propios compatriotas. Vivir allí es muy complicado». «¿Y por qué no se van?, se preguntan algunos añadió Lasarte. Pues porque no tienen a dónde ir. De hecho, muchos de los que se fueron han vuelto, porque es un país devastado».Paradójicamente, el entorno de la Zona parecerá paradisíaco al observador no avisado. «Tú estás allí y no tienes la impresión de que pase nada malo indicó Rodríguez. La naturaleza lo invade todo y, como no se ha hecho una inversión en veinte años, da la sensación de que se ha parado el tiempo. Es incluso demasiado bonito. Y, sin embargo, el peligro está agazapado tras cualquier gesto cotidiano, como beber agua o sentir que el viento te acaricia la cara. Resulta inquietante». Como ejemplo, Lasarte apuntó el caso de los alimentos: «A causa de la radiactividad, tienen prohibido cultivar casi el 80% de lo que cultivan en las huertas, pero lo hacen y se lo comen, porque tienen que subsistir». Morgan filmó “La Zona” a lo largo del año pasado, en tres viajes diferentes, y no han concluido el montaje hasta la semana pasada. «Hemos tenido mucha suerte, tanto por el apoyo de Chernobil Elkartea como porque, al amparo de la Revolución Naranja, la gente estaba deseando hablar. Los afectados nos acogieron con los brazos abiertos, como si nos agradecieran que nos acercásemos a ellos sin mascarillas y accediéramos a comer sus patatas», declaró Rodríguez. Morgan ha llegado ya a un acuerdo con TVE que permitirá proyectar “La Zona” en salas.
Un mensaje antinuclear
El mensaje de “La Zona” no es explícitamente antinuclear. Implícitamente, sin embargo, pocas dudas pueden caber al respecto. Los responsables de Morgan no lo niegan. «Estamos asistiendo en todo el mundo a una auténtica campaña de relanzamiento de la energía nuclear y, en ese sentido, nos ha perecido oportuno hacer una película como ‘La Zona’», afirmó Asun Lasarte. «Creemos que puede servir para que, en caso de que se produjera un debate público, la gente decida con más criterio si quiere tener una central cerca», añadió Carlos Rodríguez. -
«La guerra», de Berdejo
DONOSTIA
Además de “La Zona”, en la sesión de las 19.45 de los Encuentros, hoy se proyectará “La guerra”, cortometraje codirigido por Luiso Berdejo y Jorge C. Dorado. Se trata de un filme realizado gracias a que el guión obtuvo el premio Proyecto Corto de Canal Plus en la Semana de Cine de Terror de Donostia. Se estrenó hace apenas tres meses, en el Festival de Gijón, y, a pesar de su corta andadura, ha cosechado ya varios galardones internacionales. Según indicó a GARA el donostiarra Luiso Berdejo, se trata de una historia ambientada en la II Guerra Mundial, en un pueblo francés. Un niño está encerrado en un armario y cuenta cómo ha llegado hasta allí.
De Chile a Bosnia
DONOSTIA La sesión de noche (23.00 horas) estará hoy protagonizada por el filme “Apaga y vámonos”, dirigido por Manel Mayol. Está centrado en la lucha del pueblo mapuche contra la presa que ENDESA inauguró hace dos años en el río Biobío. Una lucha marcada por la represión. Como aperitivo a este filme, en el Teatro Principal se proyectará el cortometraje (37 minutos) “Sabur. Un viaje a Gorazde”, codirigido por Irene Cormenzana y Maru Solores y producido por SOS Balcanes. Desde el año 2000 SOSBalcanes organiza un viaje cada mes de agosto a Gorazde, en Bosnia-Herzegovina, con el objetivo de promover la reflexión en torno a la guerra o, mejor, las guerras.
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