La guerrilla talibán ha accedido a la petición de una delegación de diplomáticos surcoreanos de mantener conversaciones directas sobre la suerte de los misioneros de una iglesia presbiteriana capturados el 19 de julio en la carretera nacional de Kabul a Kandahar.

Los talibán, que han ejecutado ya a dos de los capturados, exigen la puesta en libertad de guerrilleros presos. El Gobierno títere de Kabul, presionado por EEUU para impedir un intercambio de prisioneros, exige la inmediata puesta en libertad de las 16 mujeres capturadas.

Ocho diputados surcoreanos, entre ellos uno de los dirigentes del partido en el poder, han anunciado su inminente viaje a Washington para tratar de implicar a EEUU en una solución a la crisis. EEUU criticó duramente el intercambio de prisioneros que permitió la puesta en libertad del italiano Daniele Mastrogiacomo.