Ante la alarma que ha suscitado entre las formaciones políticas que los tres ediles de EB-Zutik de Arrasate hayan afirmado que no encuentran «elementos nuevos» que les haga replantear su postura contraria a secundar una moción de censura contra la alcaldesa ekintzale, Ino Galparsoro, máxime cuando sin su respaldo no puede salir adelante el texto de PSE y PNV, la Ejecutiva Federal de Izquierda Unida exigió a los concejales de EB de Arrasate la «inmediata rectificación» de su decisión. Ezker Batua, por su parte, confirmó que sus estatutos les impide actuar contra el comité local del municipio guipuzcoano, pero informó de que propondrá reformar el reglamento interno en la Asamblea General que celebrarán a finales de mayo.

«No podemos hacer más que instar a que modifiquen su postura y decir que no lo compartimos», aclaró el portavoz de la Presidencia de EB, Mikel Arana, en la rueda de prensa que llevó a cabo ayer por la tarde, después de que la Ejecutiva Federal de Izquierda Unida mostrase su enfado ante la negativa de los ediles de Arrasate a secundar la moción de censura.

Aunque volvió a desautorizar públicamente a los concejales de Ezker Batua de Arrasate, Arana leyó el artículo 36.e de los estatutos de la formación federalista en el que se indica que «como competencia exclusiva le corresponde a las asambleas locales aprobar las alianzas con otras fuerzas políticas del ámbito municipal, así como los programas de gobierno local en el caso de gobernar con otras fuerzas políticas». No obstante, la dirección de EB intentará modificar el reglamento interno para evitar que decisiones como la de Arrasate no sean competencia exclusiva de la asamblea local.

«Que hablen con el PSE»

Arana quiso dejar claro que el posicionamiento de la asamblea de Arrasate «no responde al sentir mayoritario ni de nuestra militancia ni de nuestra base social». La Ejecutiva federal de IU también se dirigió a los concejales de Arrasate en similares términos.

También apuntó Arana a que «todavía quedan días» hasta la celebración del Pleno de Arrasate el próximo jueves, día 24, e invitó a sus concejales a que prosigan con las conversaciones y los contactos que emprendieron el pasado lunes con el PSE «al objeto de consolidar una mayoría cualificada de gobierno y un programa que garantice materializar esa moción de censura y la gobernabilidad durante los próximos tres años».

Al respecto, el portavoz de la Presidencia de EB pidió al PSE la «misma flexibilidad» que les pide a sus cargos públicos de Arrasate, porque, según reconoció, en la citada reunión del pasado lunes desde el PSE «nos pidieron un apoyo previo a su candidatura, postergando el debate sobre los compromisos de gobierno para un futuro, lo que el PSE sabe que, prácticamente, es un brindis al sol».

Mikel Arana adelantó también que, en caso de que no prospere la moción de censura contra la alcaldesa ekintzale por no recibir el apoyo de EB, la dirección de la formación no procederá contra los ediles con medidas disciplinarias, «porque están actuando según las normas de EB». Acto seguido, reiteró su intención de promover el cambio del reglamento interno para que en el futuro, de darse situaciones similares, la última decisión no recaiga en las asambleas locales, sino en «los máximos órganos de dirección» del partido federalista.

Eusko Alkartasuna también tuvo ayer palabras para el PSE, después de que tanto Rodolfo Ares como Patxi López les conminase a replantear su postura de no secundar las mociones de censura contra EAE-ANV más allá de la de Arrasate. Al respecto, el secretario de Comunicación de este partido, Mikel Irujo, respondió a López que «el PSOE no es el partido más indicado para hablar de dignidad política» ni para dar lecciones.

Mediante una nota enviada a los medios de comunicación, Irujo consideró paradójico que el PSE «haga una llamada a la unidad pero se limite a hablar de dos formaciones políticas», y aseguró que EA no se integrará en estrategias ajenas a la suya, ya que entiende que «la unidad se basa en el consenso y el PSOE no busca el consenso».

Asimismo, y dirigiéndose al Gobierno español, el representante abertzale preguntó cuál es «su política antiterrorista, ya que las vías exclusivamente policiales han demostrado sobradamente su fracaso durante décadas». Recordó que EA mostró su rechazo ante las ilegalizaciones y consideró que «el PSOE debería asumir su responsabilidad en esta materia y ser consecuente, porque lo que no se puede es dar un giro de 180 grados en materia antiterrorista en función de intereses electoralistas y exigir al resto de partidos un seguidismo total y acrítico».