La deuda les saldrá más cara a Lakua y a Iruñea
El deterioro presupuestario, las previsiones de deuda y la influencia negativa de la economía española han hecho que la calificación de la deuda de la CAV y de Nafarroa, según los parámetros de la agencia Standard & Poor's, haya caído de «AAA» a «AA+», todavía alta pero que podría degradarse ante la «perspectiva negativa» que también ha endosado S&P a la situación económica de Hego Euskal Herria.
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La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's (S&P) ha rebajado los ráting a largo plazo de la CAV y Nafarroa, que pasan de «AAA» (calidad extrema) a «AA+» (máxima calidad superior) y que además reciben una «perspectiva negativa» con posibilidad de una nueva rebaja. La decisión de la agencia se produce un día después de que aplicase un recorte en la nota del Estado español, que se sitúa ahora un escalafón por debajo de la del conjunto de Hego Euskal Herria, tras pasar de «AA+» a «AA» (calidad superior media).
En el caso de la CAV, desde S&P explicaron a Europa Press que la rebaja refleja el deterioro presupuestario registrado desde 2008 que, en su opinión, situará la deuda por encima del 50% de los ingresos operativos a final de año. Recordaron que hace dos años, la CAV era una de los pocos territorios sin deuda de Europa. La agencia también argumenta la rebaja crediticia por la contracción de la actividad económica en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, aunque subraya que el rating asignado a la CAV es superior al del Estado, toda vez que la tasa de paro se situó en el 11,7% a finales de 2009, la segunda más baja de las comunidades autónomas. Por lo que respecta a la perspectiva negativa, dice que la CAV se verá afectado por el escaso crecimiento económico del Estado español (una media del 0,7% anual hasta 2016, según la agencia), dado que el Estado concentra el 55% de su comercio exterior.
En el caso de Nafarroa, la bajada crediticia se debe, según la información facilitada por el Gobierno de Miguel Sanz, a la revisión de la expectativa de crecimiento tanto para el Estado español como para la economía del herrialde.
Al igual que sucede con la CAV, S&P destaca sobre Nafarroa que el Estado representa casi el 60% del comercio exterior navarro, y cree que el bajo crecimiento de la economía española «supondrá un pesado lastre para el dinamismo económico de la región, y por ende para sus ingresos impositivos».
La revisión a la baja de las perspectivas económicas se traduce también, según dicha fuente, en un «empeoramiento" de sus perspectivas presupuestarias a largo plazo en relación a sus proyecciones anteriores».
«De acuerdo a nuestro escenario central actualizado», agrega la información de la agencia, Nafarroa «mostrará déficits después de inversiones cercanos, en promedio, al 8-9% de los ingresos no financieros de aquí a 2012, con lo que la deuda llegaría el 70% de los ingresos corrientes a cierre de 2012».
El consejero de Lakua de Economía, Carlos Aguirre, valoró que en unos momentos de «fuertes turbulencias del sistema financiero, se puede considerar como un muy buen referente que la calificación sea AA+». En declaraciones a Europa Press, dijo que esperaba esa rebaja y trató de lanzar un mensaje positivo. Por contra, su homólogo navarro, Álvaro Miranda, lamentó la «muy mala noticia» de la recalificación, si bien opinó que su perjuicio no será tanto económico como «de reputación». En declaraciones a Efe, Miranda sostuvo que la nueva calificación no influirá en operaciones a corto plazo, ya que su departamento colocó hace meses «en condiciones muy buenas» la deuda que necesitaba para financiar el Presupuesto de este ejercicio.
La Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE) estarían «a punto» de cerrar un acuerdo con las autoridades griegas sobre el plan de ajuste de tres años que deberá aplicar el Gobierno de Atenas para beneficiarse de un plan de rescate de hasta 120.000 millones de euros que evite su quiebra, según anunció ayer el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn. Aseguró, a este respecto, que las negociaciones concluirán «en los próximos días», aunque no dio más datos.
«No puedo dar detalles porque estamos a punto de concluir las negociaciones», agregó el responsable de Asuntos Económicos, quien destacó, en una intervención en la que no admitió preguntas, que los expertos del Ejecutivo comunitario están trabajando «día y noche» para lograr resultados. Explicó que el resultado de este diálogo será «un programa multianual que conducirá a un importante ajuste fiscal y estructural en Grecia», que deberá aplicar las medidas acordadas en el programa como condición para beneficiarse de los préstamos bilaterales de los países de la eurozona.
Mientras tanto, Yorgos Papandréu, primer ministro griego, se reunió con agentes sociales para darles los detalles del paquete de austeridad con el que busca responder a las exigencias internacionales sobre su país. El plan de ahorro comprende fuertes recortes de los sueldos de los funcionarios y la congelación salarial en el sector privado. Además, prevé aumentos de varios impuestos, como el IVA, así como más cargas impositivas sobre el tabaco, alcohol y gasolinas, entre otros. También habrá recortes en las jubilaciones y una congelación de la contratación en el sector público, con excepción de Educación, Sanidad y Defensa. GARA
Elena Salgado intentó ayer quitar hierro a la rebaja de la calificación de la deuda española que hizo la víspera S&P. De hecho, la vicepresidenta primera del Gobierno español sostuvo que la nota obtenida es «excelente» y que confirma las perspectivas del Ejecutivo del PSOE, a pesar de que la noticia fue recibida el miércoles con muestras de pánico en la bolsa, en los medios especializados y por parte de la mayoría de los portavoces políticos.
Salgado dijo también que los datos que maneja su equipo sobre la situación económica son «positivos» aunque, al no haber «confirmación oficial» sobre los mismos, quiso mostrarse «prudente». GARA
