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Bilbao pide una reunión con Patxi López y que se retrase el veto al proyecto de Urdaibai

El diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, pidió a al Gobierno a Lakua que retrase su decisión de vetar el proyecto del Guggenheim en Sukarrieta, ya que afirma que todavía hay «tiempo para llegar a un acuerdo». Además, solicitó una reunión con el lehendakari, donde estaría dispuesto a «flexibilizar» su postura para llegar a un consenso entre las dos partes.
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Maddalen LARRINAGA | BILBO

José Luis Bilbao, diputado general de Bizkaia, quiso dejar claro que la Diputación Foral no está dispuesta a alimentar la polémica sobre el proyecto del Guggenheim en Sukarrieta, ya que considera que todavía existe «margen para un acuerdo». Bilbao convocó ayer a los medios para solicitar públicamente un encuentro con el lehendakari de Lakua, Patxi López, una reunión en la que el diputado se comprometería «a flexibilizar al máximo» sus planteamientos para alcanzar un acuerdo.

El pasado miércoles, el patronato del museo decidió aplazar a una próxima reunión, que por el momento no tiene fecha, la decisión sobre la continuidad del proceso de ampliación de la pinacoteca en la comarca de Urdaibai, una iniciativa que enfrenta al Gobierno de Lakua y a la Diputación, y que requiere del consenso de ambas para su desarrollo.

La consejera de Cultura, Blanca Urgell, afirmó tras la reunión del pasado miércoles, que la ampliación de la pinacoteca en Urdaibai es «una línea muerta», y que la discusión sobre este tema «debe zanjarse».

Por ello, en un intento de acercar posturas, José Luis Bilbao quiso transmitir el ofrecimiento a Patxi López de tener una reunión para intercambiar opiniones e ideas. «Mi agenda, para compartir con el lehendakari todos estos extremos e intentar llegar a un punto de acuerdo, está abierta». «Quiero un acuerdo que nos lleve al escenario dibujado, no más allá», dijo.

Quiso subrayar que «el proyecto de ampliación en discontinuidad del Guggenheim en Urdaibai es un proyecto del Museo Guggenheim-Bilbao, no es un proyecto de la Diputación». A su vez, aclaró que han sido los órganos propios del museo quienes han aprobado el plan estratégico en el que se encuentra en estos momentos dicha iniciativa.

Por ello, en opinión de Bilbao, «corresponde a las instancias del museo, y en concreto a su patronato, validar, o en su caso modificar, las previsiones establecidas en su plan estratégico». Por ello, deberá ser el patronato el que tome en consideración la convocatoria internacional de ideas arquitectonicas para el proyecto Urdaibai. Pero, añadió que es compromiso de la Diputación Foral de Bizkaia «correr con todos lo gastos» que pudiera ocasionar ese concurso. «El Gobierno de Lakua no se verá comprometido en un sólo euro», puesto que ya existe un convenio entre la Diputación y la Fundación Solomon R. Guggenheim respecto a los costes.

Sobre este concurso, aclaró que es el «punto de partida para tomar o no acuerdos decisivos» ya que, en su opinión, no se pueden tomar decisiones sin antes tener toda la información sobre la mesa. Por eso, «este paso es el único que por el momento pretendemos abordar», explicó el diputado general. No tomarán ninguna otra decisión hasta que «las ideas, los estudios arquitectónicos, hayan sido presentados, seleccionados y tasados». Y transmitió el deseo de que Patxi López aplace su decisión sobre el proyecto, que los miembros de PSE rechazan, hasta la resolución del concurso.

«No hay falta de tiempo»

Tras la última reunión del patronato del Guggenheim, el ente foral remitió una nota en la que decía que no alimentaría la polémica sobre este proyecto tan conflictivo. Consideraban que todavía existe margen para conseguir un acuerdo entre las partes implicadas. «No vamos a entrar en polémicas estériles. Comparezco para alimentar la espectativa de un acuerdo», dijo Bilbao.

Por ello, ayer ante los medios, el diputado general quiso aclarar que no era su intención «entrar a contestar las cosas que en los últimos días se han dicho en relación al proyecto o a las reuniones del comité ejecutivo y del patronato de la Fundación Guggenheim-Bilbao».

Siguen creyendo que este proyecto es un proyecto «estratégico» para Bizkaia, que «es bueno para Urdaibai», y que es una oportunidad de «futuro para todos». «Creemos en la iniciativa» sentenció, «somos muchos los que creemos en este proyecto». Y es que, en su opinión, este plan puede ser la pieza clave para el desarrollo de empleo y de progreso para la comarca de Busturialdea y, al fin y al cabo, para toda Bizkaia.

Además, Bilbao ofreció al Ejecutivo de Gasteiz formar parte del jurado de la convocatoria, «para velar por la transparencia» de ese proceso. Expresó su disposición a «ceder el protagonismo y la responsabilidad» en el proyecto a López, «si así lo desea el propio lehendakari», y «porque le corresponde en el ámbito institucional y en el propio Museo», ya que es él el presidente del patronato del museo.

COSTES

En los trece estudios de viabilidad que encargó la Fundación, se preveía un coste aproximado de construcción del edificio de 133 millones de euros y una afluencia media de visitantes de 150.000 personas al año.

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