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TOUR 2011 Mañana sólo se sube el Aubisque y el sábado espera Plateau de Beille

Tourmalet y Luz Ardiden despejarán muchas incógnitas

La etapa más dura de los Pirineos presenta tres cimas de entidad en los últimos 70 kilómetros de una larga jornada de 211. Marcará las primeras diferencias.

Joseba ITURRIA | ENVIADO ESPECIAL

El Tour llega hoy a los Pirineos con una dura etapa en la que el Tourmalet y Luz Ardiden ofrecen la suficiente entidad para empezar a despejar las dudas y conocer el estado de forma de los candidatos a los puestos de honor y las secuelas de las caídas que muchos de ellos han sufrido.

La etapa de hoy es la más exigente de los Pirineos, con 211 kilómetros que van a madurar las piernas de los ciclistas antes de superar tres puertos de entidad en el último tercio del recorrido. La Hourquette d'Ancizan, que se corona a 69 de meta, es la subida menos conocida. Es un Primera que presenta una ascensión de diez kilómetros al 7,5%, que es especialmente duro en su inicio. Los tres primeros presentan una media del 9%.

Su bajada casi empalma con la subida del Tourmalet por su vertiente tradicional desde Sainte Marie de Campan, con sus 17 kilómetros al 7,3% y su dureza concentrada en los últimos ocho, en los que la pendiente media es superior al 9%. Su cima está situada a 35 de meta. Se baja hasta Luz Saint Sauveur y desde ahí comienza la subida de Luz Ardiden, 13,3 kilómetros al 7,4%. El kilómetro más duro está entre el cuatro y el cinco al 10%.

El recorrido presenta dureza suficiente para que se realice la primera gran criba y la duda estriba en saber si alguno va a intentarlo desde el Tourmalet o los favoritos lo dejan todo para Luz Ardiden. En esos dos puertos se verá la respuesta del Saxo Bank y de la rodilla de Contador. Si quiere hacer diferencias intentará endurecer la carrera desde el mítico puerto pirenaico.

¿Qué harán los Schleck?

El madrileño invitaba el lunes y volvía a hacerlo ayer a atacar a los Schleck. Pero lo normal es que los hermanos no se guíen por esas declaraciones y cedan la iniciativa a Contador y que Andy se limite a seguir su rueda y Frank salte a por aquellos favoritos que lo intenten desde lejos. Es la ventaja que representa tener 1.30 a favor, dos líderes de ese nivel y un equipo que con Monfort, Gerdemann y Fuglsang puede ayudarles bien en la alta montaña. Contador tendrá a Navarro y Jesús Hernández como sus dos principales apoyos y hoy se podrá ver el estado de forma de líderes y gregarios.

Es el día clave de los Pirineos. La etapa de mañana es más corta, sólo 152 kilómetros, y el único puerto de alta montaña es el Aubisque, que se corona a 42 de la meta de Lourdes. Se sube desde Laruns, con 16,4 kilómetros al 7,1%. Para el sábado quedarán 168 kilómetros desde Saint Gaudens hasta la cima de Plateau de Beille, una ascensión fuera de categoría de 15,8 kilómetros al 7,9%, con la mayor dureza en los cinco kilómetros iniciales al 9%. Es una etapa dura. Antes de Plateau de Beillle, se sube Aspet (2ª, km. 26, 4,7 kms. al 9,7%), la Core Montée (1ª, km. 62, 14,1 kms. al 5,7%), La Trape (2ª, km. 94,5, 6 kms. al 7,2%), Agnes (1ª, km. 109, 10 kms. al 8,2%) y Lers Montée (3ª, km. 117, 3,8 kms. al 5,5%).

40 kilómetros

Es el número de kilómetros que los ciclistas deben subir en los últimos 80 de etapa, con tres puertos en los que la pendiente media está en el 7,4%. La clave de la etapa estará en el ritmo al que se suba el Tourmalet.

PLATEAU DE BEILLE

La etapa de mañana con paso por el Aubisque y final en Lourdes es propicia para escapadas y no se espera movimiento entre los favoritos, que tendrán el sábado otro final en alto y seis puertos en 168 kilómetros de recorrido.

Tras la paellada, la subida de ESAIT reivindicativa

Tras la primera jornada ayer de los actos organizados por ESAIT en Luz Ardiden con la Euskal Jaia y la paellada, la coordinadora que reclama la oficialidad de las selecciones vascas impulsa hoy a partir las 9.30 de la mañana la marcha cicloturista de 15 kilómetros desde Luz Saint Sauveur.

Una llegada con ganadores de primer nivel

La de hoy es la octava llegada del Tour a Luz Ardiden, donde, además de Laiseka (2001) e Indurain (1990), han ganado Delgado (1985), Lauritzen (1987), Cubino (1988), Virenque (1994) y Armstrong (2003). De las siete subidas, en cinco el maillot amarillo en Luz Ardiden ganó el Tour.

Frío, pero sin previsión de lluvia en las cimas

Las previsiones meteorológicas apuntan a que no lloverá hoy en la parte final de la etapa, pero se anuncian temperaturas inferiores a los diez grados en las cimas del Tourmalet y Luz Ardiden, que están situadas a 2.115 y 1.715 metros de altitud, respectivamente.

Una cima con nostalgia para el ciclismo vasco

La etapa de hoy encierra dosis de nostalgia para el ciclismo vasco porque el día 19 se cumplirán veinte años desde que Indurain atacó precisamente en el descenso del Tourmalet con Claudio Chiappucci, al que dejó ganar en Val Louron, donde vistió su primer maillot amarillo en la prueba. Era una etapa de 232 kilómetros con salida desde Jaca y subidas a Portalet, Aubisque, Tourmalet, Aspin y Val Louron. En ella sentenció el Tour.

También se cumplen diez años el día 22 desde que Roberto Laiseka dio en Luz Ardiden la primera victoria a Euskaltel en el Tour en su debut en la prueba, que se recuerda como ninguna otra del equipo naranja. Fueron 144 kilómetros de una jornada con salida en Tarbes después de una exhibición de Armstrong en Saint Lary. También en Luz Ardiden Miguel Indurain demostró un año antes de ganar su primer Tour que era el más fuerte incluso en la alta montaña. En 1989 ya había ganado su primera etapa en alto en Cauterets, también en Pirineos, pero la de 1990, cuando fue el hombre más fuerte de la carrera y sólo el trabajo a favor de Delgado le privó del triunfo final, tuvo un valor especial. No ganó tras ser el más fuerte de una escapada, como el año anterior, sino que lo hizo al disputar con los mejores la etapa.

Si Tourmalet lo significa todo para el Tour, Luz Ardiden representa mucho para el ciclismo vasco. También el equipo Orbea logró en esa cima su triunfo más grande junto a la Vuelta de ese año 1985, ambas con Delgado. La de Luz Ardiden fue una victoria de equipo. Del Ramo atacó en el Aspin, esperó a Pello Ruiz Cabestany para llevarle hasta que en el Tourmalet el donostiarra trabajó para Delgado, que remató en Luz Ardiden. Joseba ITURRIA

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