El circo más grande abre el telón: comienza otra edición de la Fórmula Uno
El más importante espectáculo automovilístico, el mundial de Fórmula Uno, está a punto de arrancar. Los pilotos y los bólidos más rápidos, con la puesta a punto lista, aguardan en el desierto de Bahrein a que se dé el banderazo de salida. Veintidós pilotos exhibirán sus cualidades, pero sólo uno se coronará campeón. ¿Sucederá alguien a Fernando Alonso, o volverá el asturiano a reinar?
Pasen y vean, damas y caballeros, niños y mayores, que el espectáculo va a empezar! ¡Abróchense los cinturones y procuren no tardar en acomodarse, no despistarse, no pestañear, pues el Circo Más Grande Jamás Soñado, el circo de la todopoderosa Fórmula Uno está a punto de dar rienda suelta a sus bestias, y perderse detalle podría significar perderlo todo!
En el Oriente del globo, allá donde el sol nace con poderoso vigor, la tierra quema y el asfalto se funde, allá por los desiertos de la remota Bahrein, en el circuto de Shakir, dará comienzo a la temporada 2006 de uno de los espectáculos más importantes del calendario internacional. Veintidos pilotos de once escuderías distintas competirán por demostrar al mundo cuán rápidos pueden girar durante dos horas de carrera, Hombre no hay signos de paridad sobre este respecto en el particular universo de la Fórmula Uno y máquina, en perfecta combinación entre fuerza e inteligencia, elegancia y pericia, lucharán durante diecinueve grandes premios en pos del principal objetivo: la victoria, tanto en el apartado de pilotos como en el de constructores. Experimentados equipos de ingenieros y mecánicos han llevado a cabo sus labores de puesta a punto y, a modo de contemporáneos doctores Frankenstein, las máquinas están a punto de cobrar vida, vasto amasijo de hierros y cables, convertidas tras un arduo período de ensayos y de errores, en primorosas bestias de aleación, capaces de volar delante de nuestra retina en menos de medio segundo, que ahora acechan tras la línea de salida, ávidos de dar rienda suelta a su furia descarnada tras haber ahogado sus metálicos rugidos y sus garras de caucho durante meses en cuarteles de invierno. Mientras tanto, los más expertos domadores apuran sus látigos con los que domesticar tan indómitas fieras, después de haber pasado el silencio quejumbroso durante la laboriosa pretemporada, donde hubo que realojar diversos huecos vacíos, jubilar añejas piezas de museo y reverdecer de urgencia algunos asientos para manos más diestras, para visiones más agudas y reflejos más rápidos.
Con el Gran Premio de Bahrein dará comienzo otra impresionante temporada, con dieciocho carreras programadas a lo largo de los cinco continentes y durante 226 días. El circuito de Sakhir será el decimotercer trazado después de Silverstone, Bremgarten, Buenos Aires, Monaco, Zandvoort, East London, Kyalami, Interlagos, Long Beach, Jacarepagua, Phoenix y Melbourne en albergar la primera carrera de la temporada.
La de este fin de semana será la tercera edición del GP de Bahrein y el 751º Gran Premio en los anales de la historia del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno. Michelin y sus equipos ocuparon las ocho primeras posiciones en la carrera del año pasado, con el que posteriormente sería Campeón del Mundo, Fernando Alonso (Renault), ganando la prueba por delante de Jarno Trulli (Toyota) y Kimi Räikkönen (McLaren-Mercedes). Veintidós son los pilotos que pugnan a partir de hoy por el ansiado título de Campeón del Mundo de Fórmula Uno, pero son bastantes menos los candidatos reales a tamaña proeza. Las posibles diferencias entre la pericia de unos u otros pilotos aumentan exponencialmente en cuanto se ponen en comparación unas y otras mecánicas.
Por esta razón, únicamente un puñado de nombres contará con opciones verdaderas de alzarse con este importante triunfo, que la temporada pasada obtuvo con todo merecimiento el asturiano Fernando Alonso. El ovetense se enfrentará a toda una pléyade de estrellas de la velocidad, y para su desesperación, un enjambre de molestas moscas en su camino, dispuestas todas ellas a ponérselo imposible al actual campeón.
Por otro lado, para esta temporada habrá unos cambios de normas. Se volverá al sistema tradicional de cambio de ruedas durante la carrera. Además se usarán motores V8 en vez de los V10. El motor V8 es la principal novedad: se sustituyen los V10 de 3 litros 10 cilindros, 3.000cc por los nuevos V8 y 2.4 litros. Los motores están limitados en cuanto a peso, disponen 200 caballos menos de potencia y los equipos más modestos podrán participar con los antiguos V10 limitando electrónicamente su número de vueltas.
Los monoplazas serán más pequeños y la aerodinámica jugará un papel fundamental y los pilotos deberán modificar su estilo de conducción. El paso por curva será más rápido y aunque los coches llegarán a final de recta más despacio, los pilotos deberán alargar al máximo la frenada, pero llevarán los bólidos durante más tiempo a un número extremo de revoluciones, lo que hará crucial la fiabilidad de los motores.
Además, está el nuevo sistema por eliminación impuesto por la Federación que comienza a las 13.00 horas local en el Circuito de Shakir. Dividiéndose en tres partes: 15 minutos donde los últimos seis monoplazas quedarán eliminados, otros 15 minutos donde nuevamente los últimos seis monoplazas quedarán eliminados, y la última donde los diez coches supervivientes lucharán durante 20 minutos para obtener el mejor crono, pero no podrán repostar. Sin embargo, veremos cómo los monoplazas de escuderías punteras podrían hacer mejor tiempo en la 1ª y 2ª parte de la calificación al ir más descargados de combustible. El resto de escuderías podrían utilizar una estrategia con máxima carga de combustible de cara a retrasar la entrada a boxes.
La parcelación en bandos de la Fórmula Uno se concreta en un asunto crucial, los fabricantes de neumáticos. Considerado factor fundamental en las carreras, las gomas deciden al mismo nivel que el pilotaje o la fiabilidad del motor.
No obstante, 2006 será el último episodio de las dos facciones. Michelín se va en 2007. Ferrari, Toyota, Williams, Midland y Super Aguri montarán el producto Bridgestone, el fabricante que el año pasado cayó derrotado en su particular duelo por el mundial.
Renault, McLaren, Honda, BMW, Red Bull y Toro Rosso emplearán caucho de Michelin. Una diversificación que el año pasado tuvo su punto culminante en la parrilla de Indianápolis, con sólo seis coches en liza los Bridgestone y los demás en huelga por el peligro del trazado para unos compuestos que Michelin no supo hacer.
En 2005 el fracaso de Bridgestone tuvo que ver con su inadaptación a carreras sin cambios de neumáticos, obligados a correr con las mismas ruedas de principio a fin.
Las escuderías dispondrán de siete juegos para seco, cuatro para mojado y tres para condiciones extremas «monzón». Se pretende aumentar la seguridad siendo más blandos que los de 2005 al compensar la reducción de potencia de los motores. Hacer más interesantes los cambios pit stops. La selección de neumáticos se hará antes de que comience la calificación.
A partir del 22 de octubre, la Fórmula Uno será coto de Bridgestone. Rugen los motores. Una nueva y apasionante temporada va a empezar. -
DONOSTIA
Rossi aplaza su salto a la f-1
El siete veces campeón del mundo de motociclismo, Valentino Rossi, se pronunció sobre su paso a la Fórmula Uno después de haber probado como piloto de Ferrari en varias sesiones durante la pretemporada.
El doctor Rossi reconoció que debería de cambiar muchas cosas para adaptarse a los coches, y no sólo en lo que a aspectos técnicos se refiere, también en cuanto a ciertos hábitos de su vida cotidiana.
«Estoy contento porque en Fórmula Uno he ido veloz. El problema es el resto. El mundo del motociclismo es muy distinto y la presión es altísima», afirmó a un programa televisivo el piloto transalpino. Por tanto, su salto de las dos a las cuatro ruedas deberá esperar.
|