Violento rechazo a la reintroducción de osos en el Pirineo
·Unas 300 personas ocuparon el pueblo de Arbas, uno de los que acoge la repoblación
Unas 300 personas que se oponen a la suelta de cinco osos eslovenos en los Pirineos ocuparon ayer, de forma violenta, el pequeño pueblo de Arbas, uno de los cuatro escogidos para realizar esta operación de repoblación. Por su parte, la Fundación Oso Pardo ha pedido medidas de sensibilización.
ARBAS
Una parte de las personas que se manifestaron en Arbas lanzaron sangre animal, botellas y petardos contra la fachada de la alcaldía, antes de romper unas jardineras y recubrir varios muros con pintadas contra la decisión de las autoridades francesas de introducir osos en el Pirineo Central. La localidad de Arbas, de sólo 247 habitantes, se ha propuesto voluntariamente para acoger a los osos, junto a los pueblos de Bagneres-de-Luchon, Burgalays y Bagneres de Bigorre. El plan de introducción de osos en los Pirineos fue propuesto después de que un cazador matara a Cannelle, la última hembra autóctona de esta especie, en noviembre de 2004. Bagneres-de-Luchon y Burgalays están situados al norte del Valle de Arán leridano, a la altura del límite entre Catalunya y Aragón. Al igual que las otras dos localidades, Arbas, que recibirá su oso a mediados de este mes, pertenece al departamento de Haut-Garonne, pero se sitúa algo más al noreste, mientras que Bagneres-de-Bigorre, que acogerá dos ejemplares, se halla en el departamento de Altos Pirineos, al norte del Monte Perdido. La reintroducción se iniciará cuando finalice el periodo de hibernación, y tiene un presupuesto de 380.000 euros. Por su parte, la Fundación Oso Pardo felicitó ayer al Ministerio español de Medio Ambiente por su apoyo a reforzar la población de osos del Pirineo. Al mismo tiempo, pidió a los responsables ambientales de Nafarroa, Aragón y Catalunya que ponga en marcha «medidas de sensibilización y de concertación» con los habitantes de estas áreas.
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