ARRASATE
Miembros de Etxerat y Askatasuna comparecieron ayer en Arrasate, acompañados de allegados de Unai Parot y José Ignazio Gaztañaga, para hacer un llamamiento a participar en la marcha que este viernes partirá de la localidad guipuzcoana hasta las cárceles de Córdoba y Granada con el fin de respaldar a esos dos prisioneros.
Denunciaron que a consecuencia de «las artimañas judiciales» llevadas a cabo en los últimos meses por los tribunales españoles son cientos los presos políticos vascos a los que quieren imponer condenas de por vida «en contra de lo que dicta la legalidad española», y recordaron que emprendieron «ese montaje político-judicial» con el preso Unai Parot.
De todos modos, la nueva doctrina también ha influido en la situación de José Ignacio Gaztañaga. El arrasatearra debía haber quedado en libertad el pasado 29 de marzo, pero, con el fallo dictado contra Parot, deberá seguir encarcelado y «secuestrado otros 12 años», destacaron.
El movimiento pro amnistía repudió estos «movimientos políticos que el Estado español ha realizado mediante el aparato judicial», ya que «en el importante momento que vive Euskal Herria es una gran irresponsabilidad utilizar los derechos de los presos como moneda de cambio». Consideró que, ante esta situación, son los ciudadanos vascos los que deben ejercer de garantes de los derechos de los presos, e instaron así a movilizarse. Los tickets y bonos de ayuda para la marcha están a la venta en Irati Taberna.
Precisamente, en Arrasate, 50 personas se movilizaron ayer por los presos y otras 112 lo hicieron en Bilbo.
