La Diputación ve favorable que Txingudi se replantee construir la incineradora
La Diputación de Gipuzkoa considera favorable que la Mancomunidad de Txingudi se plantee la posibilidad de llevar sus basuras a la planta de incineración que prevé ubicar en Donostia. El presidente de la institución sostuvo que no paralizará el proyecto de Txingudi hasta haber tomado una decisión con respecto a la planta de Gaintxurizketa.
DONOSTIA
La Diputación de Gipuzkoa se mostró ayer favorable a la posibilidad de que la Mancomunidad de Txingudi decida paralizar su proyecto de construir una incineradora en Gaintxurizketa y traslade sus residuos a la planta que se prevé construir en Donostia. El diputado para el Desarrollo Sostenible, Luis Mari Oiarbide, dijo ser partidario de «una infraestructura para todo el territorio» y, en referencia a la propuesta del Ayuntamiento de Donostia de ubicar la planta en Igoin-Azpi, manifestó que si el emplazamiento cumple los «requisitos ambientales, funcionales y de viabilidad» de la Diputación no pondrá ninguna objeción.Por su parte, el presidente de la Mancomunidad y alcalde de Irun, José Antonio Santano (PSE), detalló que ha comenzado «un proceso de reflexión» ante la nueva «solución ofrecida» por el Consistorio donostiarra. Tanto Santano como el primer edil de Hondarribia, Borja Jauregui (PNV), condicionaron su integración en la nueva incineradora a que sean aceptadas las basuras de Hendaia, puesto que los residuos de esta localidad también irían a parar a la instalación de Txingudi. Advirtieron de que «de no contar con las mismas condiciones que el resto de las localidades» no se integrarán en el proyecto. Santano aseguró que no paralizará el proyecto de Txingudi hasta tomar una decisión firme.
Una decisión «oportunista»
La representante de Aralar en las Juntas Generales, Rebeka Ubera, acusó a la Diputación de «no hablar claro» y le instó a «explicar a los guipuzcoanos dónde piensa colocar el peligroso vertedero» que contendrá los residuos de «alta toxicidad» de la incineradora. Desde el Ayuntamiento de Donostia, Duñike Agirrezabalaga (IU) denunció el «oportunismo» de la Mancomunidad de Txingudi que «ahora pretende solventar sus problemas a costa de San Sebastián». Lamentó que «después de sufrir durante treinta años el vertedero de San Marcos», los vecinos de Errenteria «van a ser obligados a soportar los perjuicios de la incineradora». De hecho, vecinos de la localidad guipuzcoana mostraron su enfado ante la decisión del Ayuntamiento donostiarra e informaron de que el domingo se manifestarán para denunciar la imposición de la incineradora. La movilización comenzará a las 12.00 en el parque de Liztorreta. Bildu Hernani también mostró su malestar y recordó que la incineradora estará más cerca de Hernani, Errenteria y Astigarraga que del núcleo urbano de Donostia y que limitará con el parque natural de Peñas de Aia. «La reconversión de espacio protegido a incineradora es inexplicable» aseguraron, y consideraron que «tratan de centrar el debate en el emplazamiento de la incineradora, cuando deberíamos hablar de los impactos que tendrá».
Oiarbide habla en Bruselas de prevención de residuos
DONOSTIA El diputado para el Desarrollo Sostenible en Gipuzkoa, Luis Mari Oiarbide, anunció ayer que viajará a Bruselas para explicar el modelo de prevención de residuos de la Diputación, es decir, el PIGRUG, el mismo modelo que apuesta por la incineración. Oiarbide detalló que participará en la conferencia “Cómo legislar mejor a nivel europeo la prevención, reutilización, reciclaje y compostaje de residuos». Oiarbide informó de este viaje tras explicar en una rueda de prensa los resultados de la Campaña de Prevención de Residuos. Informó que más de 3.200 guipuzcoanos han expresado su conformidad con la prevención en materia de residuos y las prácticas de consumo responsable y reducción de basuras promovidas por la Diputación. Destacó que los firmantes recibieron un carné tras efectuar una encuesta, según la cual el 74% muestra su conformidad con la posibilidad de separar la materia orgánica. Un 82% de los encuestados expresó su disposición a limitar la propaganda en los buzones.
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