LONDRES
La Fiscalía británica anunció ayer que ningún policía será acusado formalmente de la muerte del joven brasileño Jean Charles de Menezes porque considera que realmente las fuerzas de seguridad creían que era un «terrorista suicida». El brasileño recibió siete disparos en la cabeza en la estación de metro de Stockwell, en el sur de Londres, el 22 de julio del año pasado, un día después de los atentados fallidos en el sistema de transporte en la capital británica.
Aunque no habrá procesos individuales, la Policía metropolitana será acusada de haber violado las leyes de seguridad. El informe de la Comisión Independiente de la Policía presentado a la Fiscalía en enero fue muy crítico con la operación de vigilancia e indicó que una serie de fallos en su organización y dificultades en la comunicación dieron como resultado que dos policías mataran a un hombre inocente. A pesar de ello, ayer la Fiscalía cree que no puede presentar cargos individuales contra los oficiales de policía.
Críticas de la familia
La reacción oficial de la Policía fue de satisfacción porque nadie fue acusado formalmente, pero de preocupación por la acusación general contra la Policía metropolitana. Un portavoz indicó que estos argumentos dificultan las operaciones policiales para «garantizar la seguridad de los ciudadanos».
La familia de Menezes mostró su malestar por la situación. Sus padres, que se encuentran en Brasil, fueron informados sobre la actuación de la Fiscalía, mientras que sus primos que viven en Londres, acusaron a las fuerzas de seguridad de cubrir la muerte del joven con excusas y argumentos que no ofrecen ningún respeto a la vida humana.
Posible apelación
La familia de Menezes está estudiando la posibilidad de apelar este dictamen y sus abogados se reunirán con representantes del Gobierno para que les expliquen de forma.
más detallada por qué se ha tomado la decisión de no presentar cargos formales. La familia expresó en una rueda de prensa su descontento por la situación y calificaron la muerte del joven brasileño como un «asesinato». Los familiares acusan a las autoridades de ser incompetentes y piden acceso a las pruebas sobre la investigación. Alessandro Pereira, primo de Jean Charles calificó de «ridícula» la actuación de la Fiscalía. «Tiene muchas contradicciones y me parece una vergüenza que tardaran tanto, que fueran tan incompetentes», indicó. «Es completamente increíble que le pegaran 11 tiros, no le tocaron en tres y decir que esto no es un asesinato», se quejó.
Patricia Silva Armani, también prima del fallecido, vivía con Jean Charles de Menezes cuando fue tiroteado. «Estoy irritada e indignada por esta decisión y estoy muy decepcionada. Esperábamos una respuesta negativa, pero esto es una vergüenza», declaro. «Esta gente quiere cubrir lo que hicieron».