GASTEIZ
El
martes el diario “El País” titulaba en su primera página que «el PSE sopesa romper con el PP en los municipios vascos donde gobiernan juntos» por los continuos ataques de la formación de Mariano Rajoy, el último de ellos la denuncia ante los tribunales de la reunión mantenida con Batasuna.A María San Gil, presidenta del PP en la CAV, le faltó tiempo para, en la mañana de ese mismo día, deslizar desde los micrófonos de la COPE que «a lo mejor» en la reunión del PSE con Batasuna «una de las condiciones que se pusieron es romper todo tipo de relaciones con el PP». Al mediodía, la jugada iba tomando cuerpo y San Gil, en rueda de prensa con Esperanza Aguirre, hablaba de que podía ser «una condición que Otegi puso a Patxi López para seguir negociando». Todavía, todo quedaba en el terreno de las hipótesis.
Mientras San Gil hablaba en Donostia, en Bilbo Patxi López aseguraba que el PSE había descartado romper los pactos municipales con el PP para «no contribuir a enturbiar la política» como pretende este partido. Asumió que la posibilidad se había valorado en la dirección, pero afirmó que finalmente se había rechazado.
El desmentido del PSE no le valió de nada al PP, que ayer dio un paso más. La posibilidad de la que hablaba María San Gil la convirtió en certeza su portavoz en el Parlamento de Gasteiz. Y así, Leopoldo Barreda afirmó que su partido «sabe» que «ETA-Batasuna ha pedido al PSE que rompa» los pactos municipales con el PPque mantiene en Euskal Herria.
«Ya veremos si aguanta la presión», añadió Barreda, quien prosiguió apuntando que «ha quedado clara la exigencia de ETA-Batasuna y, si el PSE acepta, constituirá el pago de un precio político y demostrará las preferencias socialistas para futuros pactos».
Consultada por GARA, Batasuna negó ayer rotundamente que haya trasladado esta exigencia al PSE, ni en la reunión oficial que mantuvieron en Donostia el jueves 6 de julio ni en ninguna otra ocasión.
«Mentirosos crónicos»
Desde la formación independentista tacharon a los dirigentes del PP, que habían puesto en circulación ese bulo, de «mentirosos crónicos».En cualquier caso, y en relación a los pactos municipales que el PSE mantiene con el PP en algunas localidades, desde Batasuna dejaron caer la pregunta de «qué hace el PSE gobernando conjuntamente con quienes no han condenado todavía el franquismo».
El secretario general del PSE, por su parte, anunció que su partido no admitirá «ninguna infamia o mentira más» del PP, y pidió a los de Mariano Rajoy que se tomen el verano para reflexionar y que rectifiquen su estrategia.
Patxi López demandó al PP que «vuelva a la senda del consenso y del acuerdo, no sólo con el PSE, sino con el conjunto de los partidos y de las organizaciones sociales en el apoyo a un camino hacia la paz, que es un camino de todos, en el que debería estar también el PP».
Y el portavoz de Presidencia de EB-Berdeak, Mikel Arana, considera que PSE y PP «están dañando» las expectativas de paz y normalización con «una política de insultos y agravios», y les solicitó que «no polemicen» en los medios de comunicación. A su juicio, «el rifirrafe permanente» entre unos y otros «es un obstáculo».