ERMUA
Los vecinos de Ermua guardaron ayer un minuto de silencio en los actos de su programa festivo en homenaje al «txupinero» Jesús María Zangitu, conocido como Karmani, que falleció el martes al estallarle el cohete que anunciaba el inicio de un festejo.Por la tarde, miles de vecinos acudieron al funeral por Jesús María Zangitu. La mayoría de los asistentes no pudo entrar en el interior de la iglesia de Santiago, que se encontraba abarrotada, y siguieron la ceremonia desde los alrededores del templo. A los oficios funerales asistieron representantes de las sesenta cuadrillas de fiestas y los integrantes de la comisión de fiestas.
Al término del funeral el féretro fue sacado del templo a hombros por miembros de la corporación de la localidad y de las diferentes cuadrillas, a los sones del “Agur jaunak” interpretado por un txistulari en medio de un respetuoso silencio.
Respecto a las causas de lo sucedido, la Ertzaintza continúa la investigación para esclarecer si el cohete que estalló estaba defectuoso o fue un accidente, y no será hasta los próximos días cuando se den a conocer más datos.
Nada más suceder el trágico suceso efectivos de la Ertzaintza requisaron todo el material pirotécnico que estaba siendo utilizado en las fiesta, con el fin de analizar su estado. Según los expertos en material pirotécnico, se trata de piezas muy seguras si se manipulan adecuadamente y si se hallan en buen estado.