DONOSTIA
Morten Skoubo sigue sin recuperarse de una inflamación del tendón de Aquiles en el pie izquierdo sufrida hace dossemanas y, tras tener una recaída en Inglaterra, los médicos han iniciado ahora un nuevo tratamiento de ondas de choque en busca de su recuperación.
Además, el jugador danés, junto con Darko Kovacevic la referencia goleadora del equipo, será sometido también a diversas exploraciones complementarias para buscar una cura que se está dilatando más de lo deseado por los técnicos realistas.
Los aficionados tienen fresco todavía en el recuerdo lo sucedido con el propio Kovacevic, que se perdió prácticamente toda la temporada pasada por un problema similar que obligó al ariete serbio a pasar por el quirófano, aunque el mensaje de los doctores realistas no es de momento pesimista.
Lo cierto es que la baja de Skoubo se ha notado mucho en la gira por Inglaterra, donde los donostiarras han acusado muchas carencias ofensivas y no han sido capaces de marcar en los cuatro encuentros allí disputados, entre otros motivos porque Kovacevic necesita también minutos para coger la forma, tras más de ocho meses parado.
Optimismo, pese a todo
Los jugadores y el propio Jose Mari Bakero son, de todos modos, optimistas a pesar de esta circunstancia y, así, Dani Cifuentes declaró ayer que el equipo «ha mejorado como grupo» y que la experiencia inglesa ha servido «para aprender», aunque en su opinión se notó «la gran carga de trabajo» de las últimas semanas.
Su compañero Diego Rivas también cree que la gira por Inglaterra ha permitido «crecer» al equipo y justificó algunas deficiencias observadas «por el agarrotamiento de las piernas, que es algo normal a estas alturas de pretemporada después de tanto trabajo físico».
