Trichet insinúa que habrá más subidas de tipos tras el alza al 3,5%
Tras la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de elevar hasta el 3,5% el precio del dinero, el presidente de la institución, Jean Claude Trichet, aseguró que los tipos de interés siguen todavía «en niveles muy bajos» y que es necesario vigilar los precios «muy de cerca», lo que deja entrever que habrá nuevas subidas en 2007. Con esta sexta subida en el último año, los tipos han aumentado ya 1,5 puntos.
BRUSELAS
A pesar de las bajas cifras de inflación en la Unión Europea, Jean-Claude Trichet insistió en que incluso después de los seis aumentos de tipos de interés desde diciembre del 2005, tras permanecer durante dos años en el 2%, la política monetaria en Europa sigue siendo «acomodaticia», y destacó que el volumen de dinero y el crecimiento de créditos es «fuerte» en la eurozona.La disposición a «vigilar el comportamiento de los precios muy de cerca» adelanta posibles subidas en el futuro, pero no el mes que viene, ya que Trichet suele utilizar la expresión «fuerte vigilancia» para anunciar inminentes incrementos. El Consejo de Gobierno del BCE elevó los tipos de interés a corto plazo un cuarto de punto porcentual, hasta el 3,5%, lo que sitúa el precio del dinero en el nivel más alto desde setiembre de 2001. Según Trichet, el principal motivo para la sexta subida de tipos en el plazo de un año es «asegurar la estabilidad de los precios» y advirtió que es necesario atender a los riesgos derivados de una inflación superior al 2% durante 2007, del «dinamismo económico», de la «robusta economía» y de la «excesiva liquidez» en el sistema. Pese a la contención de la inflación en los últimos meses, Trichet sigue insistiendo en los riesgos, de lo que no sólo culpa al encarecimiento del petróleo en los últimos meses sino incluso a los «aumentos» salariales de los trabajadores. Esta decisión confirma las previsiones después de que el propio Trichet preparara al mercado para esta medida, con lo que sus declaraciones parecen preparar el terreno para otra medida similar. Sin embargo, aseguró que pensar en una subida en febrero es una «interpretación errónea» y que el BCE se reserva el derecho a actuar en cualquier momento. Ahora, los analistas esperan que el precio del dinero siga subiendo, incluso hasta el 4% el año que viene y, aunque Trichet evitó dar detalles, afirmó que «el BCE hará lo necesario también el año que viene para garantizar la estabilidad de precios».
Inflación y crecimiento
Por otro lado, el BCE elevó su previsión de crecimiento de la zona euro para este año y el que viene. En concreto, el Producto Interior Bruto (PIB) aumentará este año entre el 2,5% y el 2,9%, frente a la previsión anterior, de entre el 2,2% y el 2,8%. En 2007, crecerá entre un 1,7% y un 2,7%, una décima más que la horquilla anterior. En 2008, el PIB aumentará entre el 1,8% y el 2,8%. Aunque el BCE rebaja su previsión de inflación, Trichet insistió en que «los riesgos siguen al alza». La institución espera que el IPC se sitúe entre el 1,5% y el 2,5% en 2007 y entre el 1,3% y el 2,5% en 2008. Para el presente ejercicio, el BCE espera que la inflación aumente entre el 2,1% y el 2,3%. El presidente del BCE destacó que el rápido crecimiento de la masa monetaria en circulación y del volumen de créditos concedidos, sobre todo para la compra de viviendas, podrían suponer riesgos inflacionistas. El PIB de la zona euro aumentó un 0,5% en el tercer trimestre y acumuló un incremento del 2,6% en términos interanuales.
Fortalece el euro y daña las exportaciones
La subida de tipos provoca, además del encarecimiento de las hipotecas, un fortalecimiento del euro. Los inversores perciben la divisa europea como más valiosa y estable, pero este fortalecimiento perjudica a las exportaciones, sobre todo en casos como Alemania, el Estado español o Gran Bretaña. -
Los sindicatos piden el fin de la escalada
BRUSELAS La Confederación Europea de Sindicatos (CES) pidió ayer que el BCE ponga fin al actual ciclo de endurecimiento de su política monetaria y no aumente los tipos de interés durante 2007. Para los sindicatos europeos, el aumento de los tipos supone un alza de la cotización del euro, lo que anula los «esfuerzos considerables» de los trabajadores para moderar los salarios y mejorar la competitividad. «No son los salarios elevados o la fuerte protección de los trabajadores los que echan a la industria de Europa, sino un euro demasiado caro», señalaron. En su opinión, si símbolos de la industria europea como Airbus «subcontratan su actividad hacia la zona dólar, es que la política monetaria ha tomado realmente una mala vía». Consumidores La Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) afirmó que «no hay razones para alarmarse por las últimas subidas de tipos pero instó a que las familias tengan un colchón económico y no se endeuden con más del 40% de sus ingresos. Además, recomendó las hipotecas de tipo variable, puesto que las de tipo fijo aún están «muy caras». La asociación de consumidores CECU dijo que la nueva subida «no es bienvenida» y, aunque «no es alarmante, sí es preocupante», ya que las familias pueden empezar a tener problemas para llegar a final de mes y pueden llegar los impagos, por lo que pidió su fin. La asociación de consumidores ADICAE consideró que la subida de ayer incrementará en unos 1.400 euros al año el coste de la hipoteca media. En cuanto a los partidos políticos, el PNV dudó de que fuera necesaria la subida de tipos; el PSE opinó que «no hace aún excesivo daño a la economía , ni a las familias ni a las empresas» y el PP culpó al Gobierno español por no controlar la inflación.
|