Art Brut o la expresi�n de los artistas que arrastran una herida existencial
La historia del �arte brut� est� �ntimamente relacionada con personalidades oscuras y man�acas, personas que sufren de delirios o trabajan al dictado de esp�ritus, pero tambi�n abundan en sus p�ginas almas espont�neas, como la de Paul Amar, que ayer estuvo en la inauguraci�n de la muestra que ha preparado la Sala Kubo y que irradian una ingenuidad y pureza desarmantes. Han incluido en la exposici�n obras de Emmanuel Lantxas, que reside y pinta en el psiqui�trico de Santa Ageda.
DONOSTIA
Dolores Dur�n, comisaria de la muestra �Art Brut. Genio y delirio�, que hoy inaugura la Sala Kubo de Donostia, fue muy concisa a la hora de definir esta corriente. �Art Brut es un t�rmino que acu�a a mediados de los a�os 40 el pintor franc�s Jean Dubuffet para designar la obra de artistas desprovistos de cultura, al margen de la sociedad, muchos de ellos internados en hospitales psiqui�tricos. Dubuffet plantea que el arte no es sin�nimo de belleza ni es hijo de la raz�n, sino el trabajo de un genio, de la locura y de los valores espont�neos. Para decirlo de otra manera, el arte ser�a la emanaci�n directa de los humores internos�, dijo.
Lucienne Peiry, responsable de la colecci�n de Lausanne y una de las personas que m�s ha trabajado para que esta corriente de arte haya salido de la clandestinidad, dijo durante la visita a la exposici�n que se trata de personas que arrastran una herida existencial. �Se trata en su mayor�a de personas que han tenido un drama personal, han vivido una guerra, el exilio o el �xodo, han sufrido una herida de la que no se reponen. El arte les permite decir lo que no han podido contar. Pero sus obras muchas veces no hablan del drama, sino que parten de ese drama para convertirse en verdaderos artistas�, dijo. Basta dar un vistazo a las biograf�as de los artistas que participan en la muestra para cerciorarse de ello. Por orden alfab�tico, Alo�se Corbatz fue gobernanta en la corte de Guillermo II, se enamor� del emperador y vivi� una pasi�n completamente imaginaria. Internada en psiqui�tricos, cre� una cosmogon�a personal de pr�ncipes y princesas entre los que aparece de forma obsesiva el kaiser. El veron�s Carlo Zinelli ten�a s�lo dos a�os cuando muri� su madre. Con 9 a�os su padre le mand� a trabajar a una granja. A la edad de 31 a�os fue internado. Curzio di Giovanni tambi�n fue ingresado en un hospital de Pavia. El b�varo Josef Hofer nunca fue a la escuela. Vivi� su infancia en el aislamiento. Era sordomudo y nunca tuvo v�nculos sociales y termin� en un psiqui�trico. Madge Gill pas� su infancia en un orfelinato. Fue m�s tarde, a la muerte de un hijo cuando comenz� a dibujar, a escribir y a bordar, guiada por un esp�ritu. Kunizo Matsumoto asisti� a un taller para disminuidos ps�quicos donde comenz� a interesarse por la caligraf�a, aunque nunca hab�a aprendido a escribir. Reinold Metz fue criado por su abuela. A los 30 a�os sinti� repentinamente que hab�a nacido para una misi�n, la de revitalizar los manuscritos ilustrados de los monjes copistas de la Edad Media. Ilustr�, por ejemplo, un �Don Quijote�.
Y son los ocho primeros de una lista de doce artistas. Sin embargo, Lucienne Peiry neg� taxativamente que pueda adscribirse esta forma de entender el arte a los enfermos con problemas psiqui�tricos. �La palabra clave que define esta corriente es la marginalidad�, dijo la especialista. Para Peiry, el creador de Art Brut es necesariamente marginal y autodidacta, elabora una nueva sintasis tem�tica e iconogr�fica y trabaja en la soledad y an�nimamente.
Paul Amar, un jubilado parisino que trabaja con kilos de conchas
DONOSTIA Uno de los artistas m�s espectaculares de la muestra es Paul Amar, que trabaja con conchas que luego pinta y abrillanta con lacas para formar paisajes y escenas. Naci� en Argel, fue peluquero y taxista y a los 55 descubre por casualidad en una tienda de souvenirs algunos objetos realizados con conchas. Se puso a realizar cuadros en tres dimensiones. En su apartamento de Par�s, que le sirve de taller, muele, graba y perfora conchas, b�garos y corales, los une con pegamento y los pinta. A sus 87 a�os, estuvo ayer, acompa�ado de su esposa, en el Kursaal, donde respondi� a las preguntas de los periodistas. �Parto de una idea, de una fotograf�a que visto o de la propia televisi�n. Tiene que ser una idea de mucha fuerza y comienzo a trabajar sin ideas preconcebidas. Naturalmente, no todos los materiales que utilizo son de cosecha propia. Hay tiendas especializadas que me surten de conchas�, dijo mientras los periodistas admiraban sus abigarrados cuadros. Relat� que comenz� a realizar gatos, perros y mu�ecas, pero las obras han ido adquiriendo una complejidad cada vez mayor. Ha tra�do a Donostia un cuadro que representa el paisaje florido de un parque, una playa con ba�istas y un circo. Figura en la exposici�n el donostiarra Emmanuel Lantxas, que reside y pinta en el hospital Aita Menni. Vivi� en Irun, donde desde muy joven estudia y expone. �He tra�do la obra realizada en Arrasate. Muchos cuadros estuvieron en la exposici�n que realic� en mayo. Son rostros, paisajes nocturnos, involuciones e introspectivas�, dijo el pintor.
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