Indonesia defendió ayer su decisión de dejar de compartir sus muestras de gripe aviaria con la Organización Mundial de la Salud (OMS), porque no quieren que la agencia de la ONU se las proporcione a farmacéuticas que desarrollen vacunas que su país no pueda permitirse.

«Las muestras que enviamos a la OMS son usadas después por productores de vacunas que después nos las venden. Esto es injusto, nosotros tenemos el virus, estamos enfermando y después ellos toman el virus de la OMS, `con el permiso de la OMS', dicen, y la producen ellos mismos», explicó la ministra de Salud, Fadilah Supari.

Aseguró que la OMS y otras organizaciones internacionales tendrán acceso a sus muestras siempre que se comprometan a no usarlas con propósitos comerciales.