La historia demuestra que el Vicente Calderón no es un estadio propicio para los intereses del Athletic. Al conjunto rojiblanco se le ha atragantado en más de una ocasión la visita a los colchoneros. La presión que ejercen los aficionados madrileños y el perfil de la mayoría de los jugadores que pasan por el Atlético no se le da bien al Athletic.

Desde su regreso a Primera División, en la temporada 2002/03, el Atlético sólo ha perdido dos de sus nueve partidos de Liga frente al Athletic y las tres últimas victorias bilbainas en el Vicente Calderón datan de la temporada 1999/00 (1-2), de la campaña 1988/89, cuando el Athletic se impuso por 0-1 al igual que en la 1979/80.

En esos últimos 25 años, el equipo madrileño ha ganado en casa al Athletic en 16 ocasiones mientras ha empatado en seis. Aunque el Athletic acumula cuatro partidos sin ganar en el Calderón con dos derrotas y dos empates, la plantilla rojiblanca se muestra convencida de que podrá continuar con la racha emprendida con Mané lejos de San Mamés.

Ha sumado 10 de los últimos 12 puntos disputados y la confianza en la formúla que utilizan fuera de casa sigue intacta, pese a la última derrota. «Aunque en casa nos están faltando cosas, fuera estamos dando una imagen muy buena y estamos sacando muchos puntos. A pesar del último resultado negativo y de la situación en la clasificación, estamos bien y eso hace que vayamos a Madrid pensando sólo en cómo les vamos a ganar y por dónde les podemos hacer daño», aseguró ayer Ander Murillo.

Otro dato para el optimismo es que al igual que el conjunto rojiblanco, el Atlético de Madrid de Javier Aguirre se está encontrando más cómodo en sus desplazamientos que en casa ya que le está costando el doble sacar los partidos adelante.

De los 36 puntos que ha sumado en 21 jornadas, ha conseguido la mitad en el Vicente Calderón y la otra mitad fuera. Sin embargo, ha disputado un encuentro menos lejos de casa y el balance de goles que presenta también deja entrever que se siente mejor sin el apoyo de su público. El Atlético ha marcado 12 goles en el Calderón y ha recibido nueve, mientras fuera de casa ha anotado 15 recibiendo tan sólo ocho en contra.

Larga sesión en Lezama

El Athletic preparó ayer su planteamiento para el Calderón con una larga sesión que se prolongó por espacio de casi dos horas en las instalaciones de Lezama.

Mané separó a la plantilla como es habitual en él y trabajó con un bloque de jugadores que apuntan a titulares. Entre ellos, destacó la presencia de Luis Prieto que dio sensación de que estará en disposición de jugar el domingo y cubrir la baja de Amorebieta en el centro de la defensa. Joseba Etxeberria también participó con normalidad en el entrenamiento, pero se ejercito con el equipo de los suplentes.

La otra novedad llegaría con la entrada de Gabilondo en la banda izquierda y, tras lo visto ayer, Yeste centraría su posición. El resto serían los mismos que jugaron contra el Betis en San Mamés. La duda estaría en quién será el jugador más adelantado. Aduriz entrenó con los titulares mientras Urzaiz se ejercitó por separado con Sarriegi ensayando tanto remates a portería como despejes.

Mané tiene por costumbre trabajar durante la semana con el equipo titular por lo que habrá que esperar por quién se decanta, aunque hasta ahora Urzaiz ha sido indiscutible en sus onces y todo apunta a que lo seguirá siendo.

En cuanto al cambio de árbitro en el Calderón, Gabilondo consideró que se trata de una «anécdota», El de Añorga fue expulsado por Pino Zamorano ante el Racing y reconoció que todavía no entiende por qué, aunque dijo que no duda «de sus intenciones», pese a que se ha publicado que es seguidor confeso del Atlético de Madrid.