Rafael Vilasanjuán2007/2/18. Catalunya.

(...) Regresa la carrera de armamentos. Sin duda, el siglo XXI ha abierto las puertas a nuevos retos globales, pero no parece que haya más imaginación a la hora de afrontarlos. Venimos siendo testigos de cómo en el ámbito de las relaciones internacionales prevalece la fuerza, y el recurso a las armas(...).

Irán y Corea del Norte son solo la punta del iceberg, porque el verdadero problema del armamento nuclear sigue estando en las mismas potencias de siempre. Hace cinco años, Putin y Bush se declararon mutua confianza y pactaron reducir a dos tercios su actual capacidad nuclear, pero (...) Rusia anuncia el despliegue de nuevos misiles ¿A qué responde este regreso a la tradición? En parte a la voluntad de Putin de retornar con fuerza a la escena global (...) Pero en parte, también, por la amenaza de Estados Unidos de desplegar sistemas de defensa nuclear en países del este de Europa. Una vez descubierta la libertad de actuar unilateralmente(...). La guerra fría ha vuelto. Por un lado, Estados Unidos, de momento la nación más poderosa que recuerda la historia de la humanidad, se debate en una violenta confrontación entre su larga tradición republicana y su más reciente ambición imperial; por otro, Rusia regresa a la escena internacional con lo peor de su pasado.

Esta misma semana Putin ha anunciado que va a multiplicar el gasto militar ¡por cuatro! Con todo, solo será 20 veces inferior al gasto de defensa americano, que ya equivale al del resto de los países del mundo juntos(...). Ninguna otra amenaza actual, incluido el cambio climático, es capaz de destruir la humanidad de un plumazo. Pero la crisis deja, además, otro debate abierto, porque si el riesgo principal a nuestra seguridad global viene ahora del terrorismo internacional ¿para qué sirve todo este armamento?

(...) Ahora sabemos que el problema de Guantánamo no es exclusivo de este enclave en la isla de Cuba. La CIA, bajo la mirada cómplice de los gobiernos europeos, ha ido creando Guantánamos por medio mundo, paraísos legales donde la tortura no es delito. Hubo al menos 1.245 vuelos. Hagan la cuenta, aunque solo sea mentalmente, porque en cada uno de ellos viajaron personas secuestradas y trasladadas ilegalmente a lugares en el limbo, con el único fin de obtener información sin limitaciones judiciales. ¿Alguien se siente más seguro después de saber esto? Guantánamo y sus franquicias en cárceles secretas alrededor del mundo son una vergüenza. Pero en Occidente suponen, además, una actitud criminal que debe ser investigada y juzgada.