Las galerías que están presentes en la XXVI edición de ARCO, que hoy cerrará sus puertas, se mostraron muy satisfechos con las ventas que realizadas. Las galerías internacionales atribuyeron este éxito al creciente interés del coleccionista privado. Sin embargo, apuntaron que siguen siendo los coleccionistas del Estado español los mejores clientes de los galeristas extranjeros.

Es el caso de la Lisson Gallery londinense, que representa a la nueva hornada de artistas de su país como Anish Kapoor, Richard Deacon y Julian Opie, y cuya estimación supera las ventas del pasado año con clientes privados, mayoritariamente españoles y portugueses.

La Edward Tyler Nahem Fine Art mantiene una oferta centrada en la Escuela de Nueva York de los años 50, con artistas consagrados como Warhol, Basquiat y Lichtenstein, cuya relevancia ha atraído a los coleccionistas más relevantes en las primeras jornadas de la feria. La mejoría en el volumen de ventas muestra la euforia que el mercado de arte internacional ha experimentado en los últimos años, que ahora se traslada a ARCO «de forma paulatina, ya que aún está lejos de las cifras de Basilea», apunta una colaboradora de la galería neoyorquina. «El coleccionista español no va a comprar obras de un artista con el que no está familiarizado», explica un representante de la galería Hackectt-Freedman.

Las galerías españolas también están contentas. «Es el año que más se ha vendido en ARCO», confirma Miguel Marcos, miembro del comité organizador de la feria. Marcos cree que el que el coleccionista haya tenido dos días y medio -uno más que en anteriores ediciones- para valorar la muestra y comprar en soledad ha influido en estos buenos resultados.

Lo efímero y frágil de la vida

Con respecto a la temática de las obras de arte, lo efímero y frágil de la vida, su caducidad, es, junto con lo cotidiano, tema de interés para muchos de los proyectos de artistas emergentes que este año se presentan en ARCO, que sólo en contadas ocasiones se ocupan de la violencia o de cuestiones políticas.

A diferencia de lo que ocurría en ediciones anteriores, la Feria Internacional de Arte Contemporáneo presenta este año las propuestas del arte más actual englobadas bajo un único paraguas y una única sección: «Proyectos», donde participan 70 galerías de medio mundo, pero donde Brasil, que calienta motores para 2008, cuando será país invitado de honor, está detrás de once de estas galerías comprometidas con el apoyo a los creadores más jóvenes.

Pintura, escultura, instalación, vídeo, todo muy bien entretejido o equilibrado, sin que la presencia de un medio destaque de manera especial sobre otro, es lo que llega hasta Ifema en estos proyectos, que el visitante puede ver expuestos en los 70 stands dispuestos por todo el pabellón 9.

De México, respaldado por la galería OMR, llegan las fotografías y los vídeos de Mauricio Alejo, que capta objetos cotidianos como bolsas de basura o pinzas de la ropa, con los que se para a reflexionar sobre conceptos opuestos como fragilidad y resistencia.

La instalación "Paperwork" (Herrmann y Wagner, Berlín), de las gemelas rusas María y Natalia Petschatnikov, es casi como un decorado teatral hecho con tiras de papel de periódico, un material efímero como efímeros son los objetos de desecho, plástico y cartón fundamentalmente, de que se sirve otra pareja de artistas, los europeos orientales Anna Passakas y Radoslaw Kudlinski (galería Peak, Toronto) para invitarnos a volver a la esencia y la poesía de las cosas más sencillas.