Alaves El ascenso sigue a diez puntos
Inmunes al sufrimiento
Un golazo de vaselina de Quique De Lucas en el minuto 79 desniveló un partido que el Alavés no supo sentenciar pese al tempranero gol de Aloisi y a la expulsión de Marc Bertrán en la primera mitad Donostiarrak ez ziren batere ongi aritu lehen zatian, baina bigarrenean jaun eta jabe izan ziren, eta bi baloi zutoinera bidali zituzten
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
Definitivamente, de tanto que les ha tocado pasar, la plantilla del Deportivo Alavés parece haberle cogido el gusto, o al menos la medida, al sufrimiento y ayer volvió a revolverse ante otra semana nociva con una victoria que pudo acercar el sueño del ascenso a siete puntos si el Almería, próximo rival en Mendizorrotza, no hubiera remontado su partido en la recta final de su choque ante el Castellón.
El partido de ayer fue una especie de refrendo a esa teoría del sufrimiento, ya que pese a que todo se le puso muy de cara con el tempranero gol de Aloisi y la expulsión de Marc Bertrán antes del descanso, tuvo que recurrir a un destello de gran calidad de Quique De Lucas a once minutos de la conclusión para sacar adelante un partido que debió haber sentenciado mucho antes. Debió ser un partido mucho más cómodo, pero la falta de acierto ante la portería de Bernardo, el excesivo individualismo de algunos jugadores y el desastre táctico con la entrada de tres pivotes en sustitución de un enlace con la delantera se encargaron de llevar el choque a ese escenario de tensión en el que tan cómodos parecen desenvolverse los integrantes del plantel albiazul.
Buscando quizá la respuesta de un plantel en entredicho, Piterman sorprendió con la incursión en el once inicial de Aloisi y Navarro, jugadores con ganas de demostrar, y lo cierto es que la jugada le salió redonda, ya que el Alavés puso el ritmo del partido desde el inicio.
Así, el Alavés apenas necesitó cinco minutos para adelantarse en el marcador, al aprovechar Aloisi el rechace de Bernardo a una gran jugada de De Lucas y Lacen. Rubén Navarro tuvo en sus botas la sentencia con menos de diez minutos jugados, pero su remate desde fuera del área salió rozando la cepa del poste del equipo canario.
El equipo albiazul estaba muy cómodo pese a las ocasiones marradas ante un Tenerife que apostó por adelantar mucho sus líneas sin crear peligro. El doble pivote Lacen-Astudillo llevaba las riendas del partido, con buenas aperturas a bandas, aunque Wellington evidenció su falta de acople al carril izquierdo.
Angel tuvo las dos opciones más claras para el equipo local en la primera mitad, primero tras un error de Gaspar y poco después al estrellar un balón en el cuerpo de Porato a bocajarro.
Superado el susto, las cosas se le pusieron aún más de cara al Alavés cuando Rubén Navarro superó a Marc Bertrán y éste le derribó cuando se plantaba solo ante el portero local, con la consiguiente tarjeta roja por impedir una ocasión manifiesta.
Casuco busca reacción
Al margen de la desventaja numérica, el partido comenzó con la misma tónica en la reanudación; solidez y especulación por parte albiazul, e impotencia por el bando local, aunque no exenta de ambición y atrevimiento.
Casuco apostó por una arriesgada estratagia, como fue la de dar entrada a tres jugadores con clara vocación ofensiva, a lo que desde el banquillo albiazul respondieron con un tercer pivote que no ayudó en nada. Aún así, Aloisi tuvo la sentencia, pero el australiano no acertó en el mano a mano ante Bernardo.
Mermada su capacidad para estirarse sin un enlace con la delantera, el Alavés pasó sus peores momentos ante el empuje chicharrero, que terminó teniendo sus frutos. Un balón colgado dentro del área por Hormiga sirvió para que Ángel rematara en boca de gol e igualase la contienda.
El tanto hizo que el Alavés volviera a la «normalidad» con la incursión de un media punta como Jandro. Aprovechando los huecos que dejó el Tenerife, el asturiano inició la jugada del gol de la victoria con un pase en que De Lucas convirtió en golazo desde casi la banda.
De Lucas
Al margen de su golazo de vaselina casi desde la banda, el catalán creó mucho peligro por su carril durante todo el partido.
El central navarro José Manuel Mateo destacó la importancia de haber encadenado dos victorias seguidas antes de los partidos ante Murcia y Almería. «Al equipo le hacía falta conseguir dos victorias y creo que esto nos da una relativa tranquilidad para afrontar dos partidos comprometidos contra dos rivales en posiciones de ascenso». Del choque de ayer, el defensa albiazul destacó que «el partido se nos ha puesto de cara con el 1-0 y la expulsión de ellos, lo que pasa es que el equipo no ha estado todo lo bien que debería porque hemos sufrido más de la cuenta».
Quique De lucas, por su parte, destacó la importancia del triunfo para seguir aspirando al ascenso y entiende que «la clave estuvo en la expulsión. Evidentemente, en cuanto a número nos favoreció, pero sicológicamente nos hizo meternos atrás. No hemos sabido leer el partido, el inicio de la segunda parte ha sido horrible y tenemos que aprender porque no podemos dar vida a un equipo con diez».
J.O.