La iniciativa de LAB arrancó el pasado 19 de febrero, el día referencial de la reivindicación del ámbito vasco en las relaciones laborales. Hace 12 años la mayoría sindical salió por primera vez a la calle para defender esa idea. El 8 de marzo la central abertzale realizó la misma petición, pero llamando a las mujeres a que participen en las decisiones, a fin de que nadie hable en su nombre.

El jueves se reunieron numerosas personas, al igual que en las iniciativas que ha impulsado LAB en los herrialdes. En lo que se refiere a las comarcas, las movilizaciones son más grandes o más pequeñas dependiendo de la fuerza que tenga el sindicato en cada una de ellas. Pero más que por las cifras, la vicesecretaria general Ainhoa Etxaide valora positivamente la campaña porque es el punto de inflexión de un trayecto. «No es algo estático, porque creemos que el debate será largo -explica-. En este momento la prioridad política es clara: hay que acordar un marco entre todos, un marco que reconozca Euskal Herria y respeta su palabra. Los sindicatos vascos también debemos reflexionar en torno a nuestro papel en la construcción del futuro en parámetros democráticos. Si hiciéramos más de lo que hacemos ahora, los pasos del proceso tendrían más apoyo social».

Mediante reuniones con delegados, propaganda en empresas, movilizaciones y demás iniciativas, LAB quiere trasladar el debate que está en marcha en Euskal Herria a los lugares de trabajo, ya que «los trabajadores constituyen la mayoría social, y para llevar adelante un proceso necesitamos su apoyo y participación».

Significado sociolaboral

La central ha expresado claramente su opinión y actitud, defendiendo el derecho de autodeterminación, «el eje fundamental para resolver el conflicto». Ahora, mediante la campaña «Langileok autodeterminazioa», pretende explicar el significado que tiene ese derecho en el ámbito sociolaboral. «La resolución del conflicto político no es sinónimo de la solución de los problemas laborales -sostiene Etxaide-. Sin embargo, si tomamos las decisiones aquí, podremos respetar la voluntad de los trabajadores vascos e impulsar cambios sociales. Los trabajadores tenemos un interés especial en resolver el conflicto, para lograr la paz y ser dueños de nuestras decisiones, porque es así como realizaremos el cambio social y político que quiera la mayoría de la población».

Según la vicesecretaria general de LAB, la situación más dura de los trabajadores es la precariedad. Sufren las consecuencias de la evolución de las relaciones laborales, pero no pueden participar en las decisiones: las reformas y las políticas se dirigen desde Madrid y París. «El sistema de pensiones también nos afecta directamente, pero no podemos tomar ninguna decisión sobre ese tema tan importante para nuestro futuro», constata. Los ejemplos no hacen referencia únicamente al derecho de decidir. «Mientras Euskal Herria continúe dividida, no podremos articularla como un espacio económico y llevar a cabo políticas integrales que aseguren su supervivencia», argumenta.

Más que agitativa, la campaña de LAB es explicativa, puesto que desea incentivar el debate «desde un punto de vista honesto». En su opinión, hay quien está utilizando el derecho de autodeterminación astutamente, defendiendo que es una reivindicación realizada en contra de otros pueblos y que rompe los principios de solidaridad con empleados de otros territorios. Ainhoa Etxaide considera que esas ideas manipulan la discusión y tienen como objetivo mantener el actual estatus político.

La iniciativa de la central abertzale, cuya base es la palabra, tiene en cuenta el mercado laboral, las relaciones entre los trabajadores. LAB entiende que el lugar de trabajo se está convirtiendo en un espacio muy amplio, donde pasamos muchas horas de la vida y de alguna manera nos aislamos de las discusiones de la sociedad. Pero considera que los lugares de trabajo son espacios para intercambiar ideas y llegar a acuerdos. Por eso ha dado fuerza a «un texto simple pero que incentive el debate». Lo ha hecho, además, en un momento en que «los responsables políticos están huyendo -la izquierda abertzale es la única que ha detallado una propuesta-, porque también es nuestra labor abrir una discusión sin límites».