El desembarco de la cúpula del PP ha conseguido unir en la crítica a todas las formaciones políticas navarras salvo las dos convocantes de la manifestación, UPN y CDN. Mientras ayer se multiplicaban las comparecencias para censurar esta movilización y la utilización de Nafarroa por parte del PP, el pre- sidente del Gobierno navarro, Miguel Sanz, acusó recibo del malestar general y quiso destacar que Mariano Rajoy «no va a presidir ni a liderar» el acto. A renglón seguido, Sanz parafraseó una expresión muy habitual del líder del PP para ar- gumentar que «muchísimos ciudadanos normales, incluidos miembros del PSOE», estarán en la movilización de Iruñea.

Poco después se informó de que la pancarta de cabeza será llevada por el Gobierno en pleno junto al presidente de CDN, Juan Cruz Alli, el máximo mandatario del Parlamento, Rafael Gurrea, y la alcaldesa de Iruñea, Yolanda Barcina.

Desde el otro socio de gobierno, CDN, Juan Cruz Alli ofreció también una rueda de prensa en la que trató de desmentir que ésta sea una iniciativa del PP, si bien saludó su presencia. Para Alli, la manifestación «nace en Navarra y en defensa de la identidad de Navarra».

A partir de ahí, el presidente de CDN se dedicó a denunciar la posición del PSN, que ayer confirmó la decisión de no secundar esta convocatoria. Alli le emplazó a que «sea consecuente con su trayectoria histórica de defensa de la identidad de Navarra», y se dirigió a sus votantes para pedirles que acudan el sábado a la calle Monasterio de Belate, de donde partirá la movilización.

Puras: «Va contra nosotros»

Ante estos llamamientos, el PSN se esfuerza en evitar que militantes o simpatizantes suyos decidan secundar la movilización. El candidato a la Presidencia del Gobierno, Fernando Puras, y el secretario general, Carlos Chivite, comparecieron en Iruñea para confirmar el rechazo de la Ejecutiva a la marcha. Y Puras aprovechó la ocasión para pedir directamente a sus afiliados que «no acudan a una maniobra de PP y UPN montada contra nosotros».

«Esta convocatoria se produce como resultado de una doble estrategia: acoso y derribo del PP al Gobierno de España, y lucha encarnizada de UPN por miedo a perder el sillón del Gobierno de Navarra», añadió Puras.

El candidato destacó que para eso, además, «el señor Sanz nos trae ni más ni menos que al caudillo de la crispación, a don Mariano Rajoy», cuando «aquí no hay nada que salvar, estamos muy seguros de nosotros mismos y nuestras instituciones».

Al hilo de ello, el candidato del PSN volvió a situar a su partido como garantía de que no habrá un cambio de estatus. Curiosamente, otro tanto hizo el PNV, por boca de su líder, Josu Jon Imaz, que lanzó su mensaje ayer en Iruñea.

Imaz aseguró que su partido «nunca» va a permitir que «Navarra sea moneda de cambio de ningún proceso de paz». «Que nadie utilice los tambores de amenaza sobre una Navarra que va a ser prenda en un proceso de paz, porque eso es radicalmente falso», añadió el presidente del EBB, que atribuyó esta supuesta intención de utilizar a Nafarroa «a la imposición totalitaria de ETA».

Batasuna: «Marionetas del PP»

Tras la confirmación de la presencia en Iruñea de la cúpula del PP con Mariano Rajoy a la cabeza, Batasuna se dirigió ayer directamente a los votantes de UPN y CDN para pedirles que «se rebelen ante la instrumentalización de Navarra al servicio de la estrategia del PP». Considera que las direcciones de ambos partidos navarros «no son ya sino marionetas en manos de Rajoy, Acebes y compañía».

«Sabemos que miles de votantes de estos dos partidos se sienten esperanzados por un proceso que pueda traer la paz y un horizonte de libertades para toda la sociedad, pero unos cuantos profesionales de la política están intentando manipular sus sentimientos, agitando el fantasma del miedo con un único objetivo: seguir a toda costa en el poder», afirmó.

Batasuna también incide en la falsedad intrínseca de lemas como el de «fueros y libertad», que llevará la pancarta de la marcha y que desembocará en el Monumento a los Fueros. A este respecto, recuerda que «a finales del siglo XIX la población navarra se echó a la calle para protestar contra los abusos del Estado español, en una gigantesca movilización social conocida como Gamazada. Fruto de aquella lucha es el Monumento a los Fueros, financiado con aportaciones populares. Ahora son los herederos de Gamazo quienes van a venir a manifestarse a Iruñea, y ensuciarán este monumento a las libertades de Navarra que, no olvidemos, tiene una inscripción en euskara que comienza con las palabras `Gu gaurko eskaldunok' (`Nosotros, los vascos de hoy en día'). Se dará la paradoja de que se reunirán junto a un monumento que proclama la identidad vasca de Navarra para rechazar esa identidad», añade.

Para Batasuna, «el único anexionismo que amenaza Navarra es el español. Lo sufrió Navarra en 1512, lo sufrió en el siglo XIX con los ataques a los fueros y la imposición de las quintas, lo sufrió con Gamazo y por eso la gente salió a la calle, y lo sigue sufriendo ahora».

Desde Madrid, Patxi Zabaleta, candidato de Nafarroa Bai, situó esta manifestación como un «sabotaje electoral» y pidió que se respete a Nafarroa como ámbito de decisión. Uxue Barkos, por su parte, acusó a Miguel Sanz de «sacar fantasmas a pasear y asustar a los navarros».

Sólo grupos ultras y organizaciones patronales respaldan la convocatoria. A la CEN se le sumó ayer el presidente de la Cámara de Comercio, Javier Taberna, quien dijo que «comparte y apoya» los objetivos de la marcha, de los que dice que «sólo deberían ser motivo de unión de toda la sociedad civil».