El primer ministro de Quebec pide el voto para evitar un nuevo referéndum
En un tenso debate televisado de dos horas, el único de esta campaña electoral, el primer ministro de Quebec pidió el voto para desterrar «la vieja película" del referéndum sobre la independencia de este enclave francófono. Jean Charest se enfrentó a los líderes del PQ y ADQ.
GARA |
A menos de dos semanas de las elecciones que se celebrarán el próximo día 26, el primer ministro de Quebec, Jean Charest, se enfrentó en un intenso debate televisado a sus oponentes André Boisclair, del PQ, y a Mario Dumont, líder de la formación de derechas ADQ.
Charest pidió a los votantes que le confíen un segundo mandato para evitar «proyectar de nuevo la vieja película» de un referéndum sobre la independencia del enclave francófono.
Sobre esta cuestión, dijo que, gracias a sus buenas relaciones con el primer ministro federal, Stephen Harper, ha conseguido el reconocimiento por parte de Otawa de la «nación quebequesa». «Yo obtengo resultados», manifestó.
Boisclair, mientras, reiteró su intención de convocar una consulta popular sobre la independencia si su partido recobra el poder y emplazó a los electores a «elegir la libertad» de Quebec. Dumont le reprochó que «vive en el sueño del referéndum».
Dirigiéndose a Charest, Boisclair le acusó de no cumplir con sus compromisos, sobre todo, los concernientes a la reducción de impuestos y a la salud. Concluyó que los quebequeses no pueden confiar en el primer ministro. Dumont también sostuvo que Charest no merece que los ciudadanos le den una segunda oportunidad. Ambos líderes criticaron «la ausencia de propuestas» constitucionales de Charest. Aunque las intervenciones fueron intensas, el debate quedó en tablas.
Según los últimos sondeos, el partido liberal de Charest obtendría el 33% de los votos; el PQ, el 29%; y el ADQ, el 26%. No obstante, esta ligera ventaja de Charest no le garantiza la victoria ya que cabe la posibilidad de formar un gobierno en minoría.
Para desestabilizar a Charest, Dumont reveló una nota del Ministerio de Transportes de junio de 2004, en la que se alertaba de los graves problemas del viaducto del Boulevard de la Concordia que se desplomó en setiembre y causó cinco muertos.