Varios eurodiputados critican el secretismo de los estados
GARA |
Varios eurodiputados criticaron ayer en Estrasburgo que la Presidencia alemana de la UE esté elaborando de manera secreta la declaración sobre el 50 aniversario del Tratado de Roma, que asentó la base para la posterior creación de la Unión Europea. Dicha declaración se hará pública el próximo día 25, coincidiendo con el aniversario exacto de la firma.
«Es necesario mostrar a la opinión las contradicciones existentes entre unos y otros. Si no discutimos públicamente estas cuestiones, la gente no nos seguirá y el riesgo es encontrarnos con un texto banal», manifestó el copresidente del grupo de los Verdes, Daniel CohnBendit. Su homólogo del grupo liberal-demócrata, Graham Watson, lamentó tener que discutir sobre «una declaración fantasma». El líder de izquierda Francis Wurtz criticó que se ha optado por elaborar este comunicado a puerta cerrada.
«Encrucijada»
Por su parte, el líder del PSE, Martin Schulz, dijo sentirse en la «encrucijada de dos caminos. O seguimos con éxito el camino de la integración europea, o nos decantamos hacia un futuro dudoso, con la renacionalización», manifestó.
El británico Nigel Farage, contrario a la UE, subrayó que «primero, nos deberíamos preguntar si la población quiere o no la UE». El francés Bruno Gollnisch, del Frente Nacional, dijo que el futuro está en los postulados del nuevo grupo parlamentario de extrema derecha, es decir, en la «identidad, tradición y soberanía».
Esta celebración está marcada por la falta de consenso de los políticos y el desinterés de los ciudadanos europeos. Con el fin de potenciar estos 50 años de historia, se han organizado un gran abanico de actividades.
Roma y Berlín, por ejemplo, acogerán conferencias sobre el futuro de la UE -uno de los retos a corto plazo es la elaboración de la Carta Magna-, eventos musicales y artísticos.