GARA > Idatzia > Euskal Herria

Ni el riesgo de riadas osa hacer frente a la marea humana por el euskara

La zona de Lizarraldea permaneció durante gran parte del día de ayer bajo la amenaza de grandes riadas que podrían provocar desbordamientos del río Ega. Además de los destrozos que esas actuaciones de la naturaleza provocan, AEK temió por que el recorrido de la Korrika pudiera verse afectado. Finalmente, ni los amagos de la Naturaleza pudieron con la carrera.

La primera irrupción de Korrika 15 en Nafarroa, la noche del martes, se saldó muy positivamente en los valles de Sakana y Arakil, donde la respuesta de la gente fue, una vez más, magnífica y fueron miles los vecinos que se sumaron a la comitiva. En pueblos como Uharte-Arakil o Irurtzun el testigo y el mensaje que éste guarda en su interior fueron recibidos por txarangas, gaiteros y cabezudos.

Tras esa entrada triunfal, Korrika cruzó Larraun y a través de Gares entró en Lizarraldea hacia las 8.30. Pocas horas antes, el servicio de Emergencias había activado la prealerta de inundaciones en la ribera del Ega. La noticia hizo saltar las alarmas, ya que la Korrika iba a transcurrir apor esa zona. Los miembros de AEK que se encargan de que la carrera cumpla día a día con el recorrido y horario preestablecidos llegaron a idear una ruta alternativa de dos kilómetros de longitud. Sin embargo, finalmente no hubo que recurrir a esa medida.

Korrika tuvo, como todos las ediciones, una gran recepción tanto en Lizarraldea como en el resto de localidades -navarras y de la Rioja alavesa- que atravesó ayer. Si en días anteriores han sido los escolares los que mayor presencia han tenido en la carrera, ayer la fotografía fue mucho más variopinta.

Pero de resaltar algún aspecto, habría que fijarse en el de los «reenganches» de algunos corredores, ya que hubo muchos que, tras hacer a pie un tramo, cogían el coche y volvían a unirse a la carrera más adelante para darle un nuevo empuje.

Mención especial se merece un hombre al que se le contabilizaron nada menos que cinco «reenganches», por lo que los organizadores han acabado por concederle el apodo de «el espíritu santo de la Korrika», por aquello del don de la omnipresencia.

Iker IRIARTE

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo