José María Hurtado, de 45 años, trabajador de la empresa de montajes eléctricos Tamoin, perdió ayer la vida en un accidente laboral en la refinería de Petronor en Muskiz, lo que eleva a 39 el número de personas muertas en siniestros de trabajo en lo que va de 2007. El accidente tuvo lugar a las 11.30, cuando el trabajador cayó desde una altura de siete metros en el momento en que procedía a quitar un disco ciego de una línea en la unidad de Aminas número 2.

Según indicó CCOO, Hurtado, junto a otro trabajador que resultó herido, «inhaló un gas tóxico por lo que perdió el conocimiento y sufrió una caída que le provocó la muerte». Osalan indicó que el empleado murió al «tratar de huir de una fuga de gas sulfídrico y no utilizó los equpos obligatorios para realizar la operación que desencadenó el escape».

El compañero que trabajaba junto a él resultó ileso al lograr escapar por un andamio. El trabajador fue trasladado con vida al Hospital de Cruces pero falleció poco después.

Tras el siniestro, los trabajadores reunidos en asamblea tanto de Tamoin -una subcontrata de Petronor- como de la propia refinería convocaron un paro de 24 horas, que finalizará hoy a las 14.00, según anunció el comité de empresa. Asimismo, los trabajadores celebrarán hoy a las 8:00 una asamblea para manifestarse posteriormente en Muskiz para «demostrar nuestro rechazo a esta lacra social que son los accidentes laborales», señaló el comité.

CCOO consideró que esta muerte podía haberse evitado porque «si se ha producido una víctima es que algo ha fallado». En opinión del sindicato, en este caso ha sido «la falta de recursos preventivos para llevar a cabo una correcta coordinación de las actividades que realizan las numerosas contratas» en Petronor.

LAB, por su parte, denunció a la patronal y, especialmente, a Petronor porque «no basta con mandar notas lamentando profundamente lo sucedido». El sindicato abertzale indicó que «lo que hay que hacer es prevención, no lamentar, lo que hay que hacer es poner las medidas necesarias para que vayamos a trabajar y podamos volver sanos y salvos a casa».

Por su parte, la dirección de la refinería lamentó«profundamente» lo sucedido y se puso en contacto con Tamoin para que transmita su pesar a los familiares del fallecido y ofrecerles «apoyo en todo lo necesario».

Concentración en Baiona

Entretanto, LAB realizó una concentración ante la empresa ADA de Baiona en protesta por el accidente que el pasado viernes sufrió un trabajador. El tornero, de 60 años, natural de Errenteria sufrió varias fracturas en el brazo izquierdo y heridas en cara y espalda. Subrayó que no es la primera vez que un accidente grave se produce en dicha empresa y denunció que «demuestra las lagunas existentes en la prevención y en la educación en seguridad». Recordó, asimismo, que en Ipar Euskal Herria en lo que va de año se han producido ya dos accidentes de trabajo mortales.