El ministro español de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, indicó ayer que los siete detenidos por la Guardia Civil el pasado miércoles pueden estar «detrás de 24 atentados cometidos en España entre 2004 y 2006». En declaraciones a los periodistas en Jaén, donde acudió a la presentación de los candidatos del PSOE a las elecciones municipales, Rubalcaba también adelantó que durante los seis registros practicados en la madrugada en Nafa- rroa y Gipuzkoa se había hallado diverso material explosivo y una pistola, así como material informático y documentación que estaría siendo analizada. A esos registros les siguieron al otros tres durante la tarde.

Mientras tanto, Joseba Lerin, Lorea Irigoien, Iñigo Orue, Itziar Agirre, Juan Carlos Herrador, Arkaitz Agote y Endika Zinkunegipermanecían incomunicados en dependencias del instituto armado, sin que se conociera si han sido trasladados ya fuera de Euskal Herria.

La Guardia Civil practicó seis registros en la madrugada de ayer: dos en Hernani, uno en el barrio donostiarra de Igeldo, dos más en Berriozar y otro en Aizarotz. Askatasuna, que alertó de la situación de incomunicación de los arrestados y denunció la «ocupación de nuestro pueblo», explicó que los guardias civiles llegaron a Hernani sobre la medianoche -«han dejado al menos una vivienda patas arriba»-; que la casa de Igeldo la dejaron precintada -las fuentes policiales indicaron que fue aquí donde encontraron la pistola-; que a Aizarotz llegaron hacia las 3.00, rompieron el cristal del portal, llamaron a todos los vecinos del inmueble preguntando por los habitantes de uno de los pisos y no se fueron hasta cuatro horas después; y que en Berriozar entraron en una vivienda y un local.

El Ministerio de Interior y la Delegación del Gobierno español en Nafarroa señalaron que fue en la bajera de esta localidad navarra donde se incautó de más de 100 kilos de material explosivo -nitrato, cloratita y polvo de aluminio-, aunque no se pudieron de acuerdo en la cantidad exacta: el primero la fijó en 140 kilos y el segundo en 170, mientras que Miguel Sanz la elevó hasta los 200. También dijeron haber encontrado en el mismo local, situado en la calle Lekoartea, dos bidones, una olla, diez temporizadores, cordón detonante, un dispositivo de radiomando y cartuchos de caza, entre otros elementos.

Ya por la tarde, agentes del instituto militar acudieron y entraron en un piso del barrio donostiarra del Antiguo -cortaron totalmente la calle Matia entre las 17.30 y las 21.00 y salieron con varias cajas de un domicilio del número 21-, un local en el de Errotaburu y una vivienda más en Alde Zaharra de Iruñea, concretamente en el número 7 de la calle San Miguel.

GARA pudo saber que este último registro y el de Aizarotz están relacionados con una misma persona, y que en la vivien- da de Berriozar reside un familiar de Joseba Lerin.