V congreso de la unión de mujeres saharauis (UNMS)
La voz y lucha de la mujer saharaui por sus derechos y la libertad de su pueblo
El campamento de refugiados saharauis 27 de Febrero y, en concreto, su escuela acogió durante tres días el V Congreso de la Unión de Mujeres Saharauis, un encuentro para reafirmar la lucha por los derechos como mujeres y pueblo.
Ainara LERTXUNDI | TINDOUF
«La mujer saharaui es una fuente de orgullo y veneración para todos los hijos de este pueblo, a los que inspira confianza y esperanza, y un digno ejemplo para todas las mujeres del mundo, en lo que a su determinación, paciencia, lucha e incesante disponibilidad para afrontar las circunstancias más adversas y los cambios más drásticos. En la lucha de liberación nacional que libramos, no se vive un conflicto de géneros, ni de clases ni tan siquiera generacional porque todos, sin excepción, estamos ante un conflicto que afecta a nuestra propia existencia y supervivencia». Con esas palabras de admiración y elogio se refirió el jefe de Estado y secretario general del Frente Polisario, Mohamed Abdelaziz, a la resistencia de la mujer saharaui en la apertura del V Congreso de la Unión de Mujeres Saharauis (UNMS).
La escuela del campamento de refugiados 27 de Febrero se convirtió durante tres días en altavoz de la lucha de la mujer por su emancipación y la libertad de su pueblo, las dos caras indivisibles de una misma lucha. «Sin independencia, no existimos ni mujeres, ni niños ni nadie», remarcó una representante de la ejecutiva de la UNMS en la reunión con las delegaciones llegadas desde diversos puntos del Estado español para exponer las conclusiones de este congreso.
Desde Euskal Herria acudió una amplia delegación (La Asamblea de Mujeres de Bizkaia, la Marcha Mundial de las Mujeres, los Consejos de mujeres de Bilbo, Ondarroa, Basauri, Ondarroa y Hernani, asociaciones de apoyo a la RASD, asociaciones de mujeres de Getxo, áreas de igualdad de Getxo, Ondarroa, Eudel, Abadiano, Hernani, el Ayuntamiento de Berriz, LAB, ESK, CGT, Emakunde, el Grupo de Género de la Coordinadora de ONGs, PTM, Ezker Batua y Emakunde).
Un momento «crucial»
En la rueda de prensa que ofrecieron el pasado miércoles en la estación de autobuses de Bilbo antes de emprender el viaje hacia Tindouf, manifestaron que el objetivo de su presencia en el congreso era «llevar un mensaje de ánimo, de apoyo y de solidaridad de las mujeres vascas y traer de vuelta el compromiso de utilizar nuestras organizaciones como altavoz».
La celebración de este congreso se produce en un momento «crucial» para el Sáhara. El próximo lunes, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, entregará su habitual informe sobre la situación del Sáhara que será debatido en el Consejo de Seguridad el 20 de abril. El rechazo al plan de autonomía de Marruecos y la reinvidicación de un Sáhara libre, sin presos políticos, y el retorno a los territorios ocupados centraron cada una de las intervenciones de esta conferencia que se celebra cada cinco años.
En este periodo, las líneas de actuación, emanadas del cuarto congreso, se han centrado en la asistencia social, la participación social y política, la alfabetización, las cooperativas, la información y cultura.
Así, la gran cantidad de trabajo que han llevado a cabo en materia asistencia social en los campamentos conllevó a que el Estado reconociera la necesidad de crear una secretaría específica que se dedique a estas instancias, la cual es dirigida por una mujer y ha contribuido a que «los problemas de las mujeres estén más visibles de manera cotidiana en el quehacer del Gobierno y nos ha permitido decicarnos progresivamente al desarrollo de otros programas».
Impulsar la participación política de las saharauis ha sido también una de las principales prioridades para la UNMS porque, si bien, «tienen derecho político, muchas veces, nos encontramos que no lo reivindican o no saben aplicarlo y siguen viendo a los hombres como principales sujetos para pedirles el voto, sobre todo, en los gobiernos de las Dayras (barrios)», manifestó la secretaria general de la UNMS, Fatma El-mehdi.
Con el fin de «concienciar sobre la capacidad y la valía de las mujeres», han realizado cursos, seminarios, talleres y charlas sobre democrcia, autoestima, liderazgo, comunicación intergeneracional, la ley de matrimonio o el divorcio. Además, la campaña con el lema «Sí a la mujer» contibuyó a conseguir un 24% de mujeres en el Parlamento.
En estos cinco años, han conseguido construir y equipar aulas en doce dayras. «Sin embargo, tenemos un gran reto para que más mujeres acudan a las clases y mejorar la infraestructura en otras dayras ya que existen grupos que aún reciben las clases en jaimas», afirmó.
«Necesitamos ser más»
A la hora de abordar la planifiación familiar, la UNMS destacó que no lo pueden plantear como proyecto porque, sencillamente, «un pueblo pequeño no tiene derecho a nada».
«Marruecos intenta hacernos desaparecer a través de bombardeos, guerras... necesitamos ser más, pero siempre velando por la salud y los derechos de la mujer porque queremos madres sanas y que puedan educar a sus hijos. En ningún momento, se le prohibe la utilización de anticonceptivos o se les obliga a tenerlos, pero nosotras tenemos derecho a defender que se tengan hijos. En este terreno, no podemos tener como ejemplo a Europa, donde, ahora, se paga para que se tengan hijos», manifestó El-mehdi.
Ante el planteamiento por parte de algunas delegadas de elaborar un código familiar y el establecimiento de pensiones a los hijos en caso de separación expuesto, El-mehdi se preguntó con ironía «si todos, como pueblo, dependemos de la ayuda internacional, ¿cómo podemos fijar que un padre pague un dinero?. No podemos hacer un código familiar porque ni siquiera tenemos nuestro propio territorio. Ello no quita que hayamos fijado normas. Un aspectivo positivo es que aquí no se pega ni mata a las mujeres».
A modo de conclusión, reiteró que «la lucha de las mujeres saharauis es la lucha de todos. No podemos dejar de ser políticas y la lucha por nuestra emancipación y la liberación de nuestro pueblo, que vive dividido y en el exilio tiene el mismo nivel de urgencia».
En medio del desierto y de la nada, en los campamentos de refugiados saharauis (El Aaiún, Auserd, Smara, Dakhla y 27 de Febrero), viven alrededor de 165.000 personas, fundamentalmente, mujeres y niños.
Marruecos presentará hoy al secretario general de la ONU su propuesta de autonomía para el Sáhara, según informó ayer el embajador británico, Emyr Jones, que ejerce la presidencia de turno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Se prevé que la delegación marroquí esté encabezada por Taib Fassi Fihri, viceministro de Asuntos Exteriores, y Fuad Ali Hima, viceministro de Interior. Los ejes centrales del plan hacen referencia a la «soberanía» de Marruecos. El Frente Polisario ha rechazado reiteradamente las intenciones de Rabat y ha dejado claro que la solución no pasa por la autonomía sino por el derecho a la libre decisión del pueblo saharaui.
«El Ejecutivo marroquí no se ha conformado únicamente con violar los derechos humanos sino que persiste en su desacato público a todas las resoluciones del la legalidad internacional», resaltó el pasado jueves el presidente Mohamed Abdelaziz ante las participantes en el Congreso de la UNMS. Denunció también el «silencio internacional ante la realidad de un pueblo agredido».