DENUNCIA DE TORTURAS
«Usan el paraguas de la tortura para criminalizar al independentismo"
Las once personas detenidas por la Guardia Civil en su última operación han sido víctimas de tortura, según la denuncia que reiteró ayer Askatasuna. El organismo antirrepresivo subrayó que «la tortura supone una de las representaciones más graves del déficit democrático que sufre Euskal Herria". Además, Julen Larrinaga destacó que esta práctica se usa también «para criminalizar organizaciones".
Beñat ZARRABEITIA | BILBO
Brutal y escalofriante. Ésa es la sensación que produjo el relato de la abogada Jaione Karrera de las torturas denunciadas por los once ciudadanos vascos detenidos en Euskal Herria durante la operación de la Guardia Civil durante los pasados días 28 de marzo y 1 de abril. Especialmente duro fue el trato recibido por Sergio Lezkano, quien, según relató la letrada, fue violado en dos ocasiones mediante la introducción de sendos palos por el ano.
Karrera, que compareció en Bilbo junto al portavoz de Askatasuna, Julen Larrinaga, comentó que «se han cumplido nuestras peores sospechas» respecto a la práctica de la tortura a los once detenidos durante los cinco días que estuvieron incomunicados. Plazo en el que ssus allegados olicitaron el habeas corpus, que fue denegado. Tampoco se ha cumplido ninguna de las medidas para evitar los casos de tortura anunciadas por el juez Baltasar Garzón el pasado mes de diciembre.
Según indicó Karrera, durante la visita que ha pudo mantener con las 9 personas enviadas a prisión, constató como éstas le relataban que habían sufrido «golpes en la cabeza, espalda o testículos, amenazas, la bolsa o mantenerse en posturas forzosas», como ocurrió en el caso de Joseba Pabon, quien ha sufrido diversas intervenciones quirúrgicas en sus rodillas y que se vio obligado a permanecer de pie durante 24 horas.
Por su parte, Joseba Lerin tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario de la capital española el primer día. Aun así, según destacó la abogada, fue trasladado nuevamente a dependencias policiales «sin informe médico y para volver a sufrir un trato idéntico al que le había llevado al hospital». Tras ser conducido a prisión y días después del período de incomunicación, todavía tenía hinchada la nariz, como pudieron comprobar en una visita.
La letrada manifestó que, a las prácticas de tortura y malos tratos anteriormente relatados, se les sumaron «amenazas con la posibilidad de detener a familiares y parejas», además de diversas vejaciones sexuales. Entre estas últimas, Askatasuna denunció que los detenidos «fueron obligados a desnudarse, siendo humillados y llegaron a darse casos donde les pasaron palos alrededor del ano». Como ya ha sido denunciado anteriormente, esas amenazas se convirtieron en hechos en la persona de Sergio Lezkano, quien «fue violado en dos ocasiones, ya que le metieron dos palos diferentes por el culo». Además, tuvo que ser trasladado al hospital debido a que «como no podían quitarle las esposas, se las cortaron con una sierra». Esa actuación policial le produjo una fuerte herida en las muñecas y tuvo que pasar a disposición médica y recibir la vacuna antitetánica».
No fueron esos los únicos casos, ya que el donostiarra Arkaitz Agote sufrió la fractura de un brazo, mientras que Juan Karlos Herrador fue obligado a chupar su propio vómito e Itziar Agirre padeció diversos tocamientos.
Jaione Karrera también quiso recordar que «una imagen vale más que mil palabras» para añadir que «así pudimos comprobar cómo salía de la Audiencia Nacional Endika Zinkunegi, en libertad actualmente, cojeando ostensiblemente y bastante deteriorado». Imagen que se pudo ver a través de ETB.
Todos estos datos fueron expuestos por los propios detenidos tanto al médico forense como a los galenos de las cárceles, y también ante el juez. Además, la letrada confirmó que presentarán denuncias formales.
«Herramienta de guerra»
Por su parte, el portavoz de Askatasuna, Julen Larrinaga, realizó una lectura política sobre la situación que se registra en Euskal Herria en los últimos meses. «Vivimos en un país donde existe la tortura, y Sanz e Ibarretxe son presidentes de un pueblo donde se producen casos de tortura», recalcó. Asimismo, aseguró que la existencia de este tipo de prácticas supone «una de las representaciones más graves del déficit democrático que se vive en Euskal Herria». Y como dato que corrobora esa tesis, dijo que «son un total de 15 las personas que han sufrido torturas en lo que va de año».
Todo ello a pesar de que, como recordó Larrinaga, durante este periodo «se ha aprobado una moción contra la tortura en el Parlamento de Gasteiz, el pasado mes de diciembre, o se han presentado propuestas parciales para acabar con el problema, como han sido las recomendaciones del Relator Especial contra la Tortura de la ONU o de Amnistía Internacional para echar abajo la incomunicación. A juicio del portavoz de Askatasuna, ésas «son buenas propuestas, pero en Euskal Herria la tortura va más lejos y sirve como herramienta de guerra para interferir en el conflicto». En consecuencia, Larrinaga señaló que el organismo antirrepresivo considera que «mientras no se dé una solución al conflicto político existente en Euskal Herria, será imposible acabar con la tortura».
En ese contexto, Askatasuna incidió en que «hay que aclarar la coyuntura política que existe detrás de estas detenciones». A renglón seguido puso de manifiesto que «el problema no está sólo en las detenciones, sino en las torturas que se han producido y en las posteriores declaraciones que han sido utilizadas para criminalizar organizaciones». «Han usado la tortura para criminalizar a la izquierda abertzale y la opción del independentismo», añadió.
Junto a ello, Larrinaga denunció las declaraciones de los últimos días en los que «Josu Jon Imaz (presidente del EBB del PNV), José Blanco (número dos del PSOE) o Leopoldo Barreda (dirigente del PP en la CAV) han hablado del paraguas de ETA». Como réplica a esas reflexiones, destacó que «el que funciona bajo el paraguas de la tortura es el `Estado de Derecho' para conseguir acusaciones, autoinculpaciones o criminalizar organizaciones».
Askatasuna ha llamado a participar en las movilizaciones convocadas para este próximo fin de semana con el objetivo de denunciar la tortura. Mañana, a partir de las 20.00, está previsto que se lleven a cabo las primeras movilizaciones, en Iruñea y en Uharte-Arakil. El sábado, la cita es a las 19.00 en el Boulevard donostiarra.
Sergio Lezkano, que además fue violado en dos ocasiones, tuvo que ser llevado a un hospital durante su incomunicación. La razón del traslado fue que tras no poderle quitar las esposas, recurrieron a una sierra, provocándole heridas.
Joseba Lerin fue trasladado el mismo día de su detención a un centro hospitalario. A pesar de ello, volvió a ser llevado a dependencias policiales sin haber recibido siquiera el informe médico. Allí volvió a sufrir el mismo trato que le llevo al hospital.
Jaione Karrera afirmó que los detenidos dieron cuenta del trato recibido ante el médico forense, los galenos de la cárcel y el juez. La letrada adelnató que presentarán denuncias formales por el trato padecido por los once arrestados.
Askatasunak gogor salatu zuen azken egunotan, batik bat Gipuzkoa eta Nafarroako hamaika atxiloketen ostean, hainbat alderdi politikoek egindako irakurketa eta adierazpenak. Errepresioaren kontrako erakundearen bozeramailearen esanetan, «botere politikotik, biolentziari buruz planteatzen diren eztabaidak zeharo hipokrita eta norabide bakarrekoak dira». Horrela Julen Larrinagak gogoratu zuenez, «Josu Jon Imazek egunero ordu bat edo bi pasatzen ditu ETAren zikloa bukatu egin dela esanez, guri herri honetan tortura, ilegalizazio, tribunal berezien eta kartzela politika kriminalaren aroak agorturik daudela entzutea gustatuko litzaiguke». Gainera, Larrinagak aipatu zuenez, «Imazek ez dio ezta minutu bat eskaini tortura edo inkomunikazioari». Egoera honek Askatasunaren ustez, «argi usten du zein den Imazen jarrera eztabaida faltsuak abiatzerakoan».
Horrekin batera, azken atxiloketak eta gero suertatu den egoerari buruz, Larrinagak nabarmendu zuenez, «badirudi, Balzak esan bezala, ETAren itzuleraren eszenatokia prestatzen ari direla, baina ETAk igandean bere konpromezuak mantentzen dituela igarri zuen». Erakunde armatuak GARAri emandako elkarrizketari erreferentzia argia eginez.
Bestalde, Askatasunarentzat, orain «jokoan dagoena gatazka konpontzeko hautu politiko edo poliziala egitean dago». Azken aukera honek «gatazka politikoaren luzapena besterik ez dakarrela» salatu zuten. Gainera, bide polizialak «euskal gizarteari sekulako iruzurra dela» azpimarratu zuen Larrinagak. Egoera honetan, Askatasunak «zergatik hitz egiten digute PNVk eta PSOEk prozesu batetaz, helburu bakarra ETAren desagerpena baldin bada» galdera luzatu zuen.
Hautaketa poliziala baieztatuz gero, errepresioaren kontrako erakundearen esanetan, «gatazkari irteera baketsu bat emateko aukera berriz galdu litekeen mementu garrantzitsu eta erabakior» baten aurrean gaude.
Askatasuna recordó que son ya un total de 15 personas las que han denunciado torturas desde el inicio de este año. En la última operación de la Guardia Civil todos los detenidos afirman haber sufrido esa práctica durante el período de incomunicación.