El secretario de Organización de EA, Rafa Larreina, expresó ayer con claridad sus temores de que el PNV pueda anclarse en el actual marco, y le advirtió de que en ese caso no será posible realizar pactos postelectorales.

En la presentación de Iñaki Agirrezabalaga como candidato a la Alcadía de Zumaia, Larreina declaró que su partido basará la búsqueda de acuerdos en «la clave soberanista y el compromiso con el derecho a decidir», de modo que «si el PNV opta por volver al pasado, a la época autonomista de Ardanza, y si opta por gobiernos con fuerzas que no tienen un compromiso claro con la defensa del derecho a decidir de nuestro pueblo, se quedará fuera».

Por contra, apuntó que «si opta por seguir una vía soberanista de compromiso con la defensa de las libertades y del dere- cho de este pueblo a la autodeterminación, está en ese campo que nosotros marcamos. La postura de EA es muy clara», añadió Rafa Larreina

López y el «raca-raca»

Por su parte, a Patxi López, secretario general del PSE, también le preocupa la posición del PNV, pero en sentido contrario. Ayer, en un acto celebrado en Donostia, se refirió al aviso lanzado el viernes por Juan José Ibarretxe sobre la posibilidad de relanzar su plan de reforma estatutaria y someterlo a votación en esta misma legislatura. En tono despectivo, López consideró que el lehendakari «vuelve a su raca-raca».

Para Patxi López, el objetivo de Ibarretxe es «querer imponernos a todos sus planteamientos, que sólo nos dividen y nos enfrentan, sin quererse enterar de que la sociedad vasca ya está en otro tiempo».

En este contexto, el portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, evitó posicionarse. En relación a los pactos postelectorales, dijo que su partido «no se cierra a ninguna fórmula siempre que se cumplan las premisas de una apuesta inequívoca por las vías políticas y democráticas y del com- promiso de realizar una consulta a la sociedad vasca».

Urkullu añadió en una entrevista a Radio Euskadi que el PNV prevé que tras los próximos comicios «habrá un mapa complejo« que precisará debate y contraste de pareceres entre los partidos políticos para poder llegar a acuerdos.