El ciclismo vasco amateur no termina de estabilizarse. Todo lo contrario. El enfrentamiento entre la Federación Vasca (FVC), con su presidente Iñaki Iglesias a la cabeza, y las federaciones territoriales de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba tiene nuevo episodio.

El miércoles, Iglesias recibió la comunicación de que Araba ha presentado una moción de censura. Los presidentes Miguel Ángel Martín (Araba), José Luis Arrieta (Gipuzkoa) e Iñaki Barrenetxea (Bizkaia) habían mostrado repetidamente su malestar con la forma de Iglesias de llevar adelante la Federeción Vasca.

Las posiciones se han enquistado aún más este año. De hecho, el calendario amateur y junior fue paralizado por el Gobierno de Lakua tras no aprobarse en Asamblea los Estatutos presentados por Iglesias.

Un acuerdo de urgencia permitió que las carreras se pudiesen disputar. Asimismo, en otra asamblea, Iglesias sacó adelante las cuentas de 2006 y el presupuesto de 2007 sin la presencia de los representantes de Gipuzkoa.

Ahora su mandato podría terminar un año antes de lo previsto. Si bien Iñaki Iglesias cuenta todavía con algunos apoyos en Bizkaia, los votos de Gipuzkoa y Araba podrían ser suficientes para aprobar la moción de censura por mayoría absoluta.

Si es así, Iglesias y la Junta Directiva al completo cesarán en sus cargos, salvo los presidentes de las territoriales, aunque seguirán en funciones y deberán convocar una reunión de la Junta Electoral en el plazo máximo de un mes para que dé inicio al proceso electoral.