Aitor Bezares es conocido en Gasteiz y Araba, fundamentalmente, por su labor sindical como delegado de LAB en Gamesa, de cuyo comité de empresa fue presidente, pero desde hace varias semanas la gente le empieza a reconocer por ser el cabeza de lista de EAE-ANV a las Juntas Generales de Araba. Concurre por la circunscripción de Gasteiz, que es legal a los ojos de la Justicia española, al igual que la candidatura de Tierras Esparsas, y al contrario de la lista de Aiara, anulada por el Tribunal Supremo. El candidato abertzale opina que el día 27 va a haber una «respuesta masiva» por parte de los electores de izquierda e independentistas, y que se notará también el hastío de mucha gente que anteriormente ha votado a otras opciones.

Concurre por una formación cuyas listas, en gran parte, han sido anuladas por la Justicia española, junto a otras muchas candidaturas. Cualquier análisis de estos comicios debería partir de este hecho, ¿no?

No queda más remedio que hablar de lo que no tendría que haber sucedido. El punto de partida debía haber sido que nos presentamos en muchos municipios, con tantas candidaturas, con un gran apoyo detrás, empezar a hablar de las iniciativas que tenemos para los barrios y pueblos... pero la actualidad manda, y lo que hoy hay que destacar es el golpeo de una ley que en su día se dibujó de forma artificial con la intención de apagar a la izquierda abertzale, una ley que nos ha afectado también a nosotros, seguramente porque somos igualmente de izquierdas y abertzales.

La candidatura que usted encabeza es legal, al igual que la lista de su partido en la circunscripción de Tierras Esparsas. La de Aiara, sin embargo, ha sido anulada. ¿Cómo afrontan esta situación? Parece surrealista.

Es surrealista, pero al final, aunque resulte kafkiano, no deja de tener una lógica. En unos sitios no nos quieren dejar presentarnos, y en otros sí, pero en aquellos lugares en los que se da a ANV opción de tener representación institucional, y no hablo de circunscripciones, sino de la institución de las Juntas Generales, se hace después de que previsiblemente se hayan anulado una gran parte de nuestros votos, que son los que vamos a recibir en Aiara. Además de que sólo se nos quiere dejar concurrir en la mitad de los lugares en que teníamos previsto hacerlo, se quiere trasladar una imagen distorsionada del apoyo que vamos a tener el día 27. No han elegido mal la circunscripción, habida cuenta de la importante tradición de voto abertzale que hay en Aiara.

¿Cree que hay un objetivo expreso de que el voto de la izquierda abertzale aparezca desdibujado?

Lo que quieren es que en esos quesitos, en los gráficos que aparecerán al día siguiente en los medios de comunicación, la franja que represente a la izquierda abertzale aparezca recortada. En muchas instituciones, el Estado español ha teni- do intención de aniquilarnos de raíz, y en otras, como las Juntas, quieren hacer desaparecer parte de nuestros votos, para que en esas gráficas parezca que hemos recibido menos apoyo del que realmente logramos.

En Araba, aunque sea de forma «mutilada», es probable que ANV tenga representación institucional. ¿Qué esperan aportar en las Juntas Generales?

Lo que queremos aportar, no sólo en esta institución concreta, sino en todas, es frescura. En todas las instituciones ha existido un partido que ha campado a sus anchas. En la CAV hay un PNV al que nadie ha hecho frente. En el caso de Araba es el PP, y en Nafarroa UPN. Se han dedicado a hacer lo que les ha dado la gana, tenemos sobre la mesa numerosos proyectos que no han contado con el apoyo ni con el debate de la sociedad. Y tampoco ha existido un enfrentamiento por parte de la oposición, que ha pasado inadvertida. Los que gobiernan ya sabemos lo que son, pero la oposición deja mucho que desear. Ha sido un fraude, y me imagino que será lo que siente una parte importante de su propio electorado.

¿Cómo valoran la respuesta del resto de formaciones ante las ilegalizaciones de las listas?

Antes de la campaña hemos escuchado por parte de algunos partidos opiniones contrarias a la Ley de Partidos. Esperamos, en ese sentido, que independientemente de lo que diga esa ley, el día 27 las papeletas de ANV que aparezcan en las urnas y han sido anuladas por el Estado español no vayan a ser tratadas como nulas. Nuestra intención es asegurar en primer lugar que las papeletas vayan a estar presentes en todos los colegios electorales, que todas las personas que libremente decidan optar por las candidaturas de ANV puedan hacerlo, y después intentaremos que, fundamentalmente aquellos partidos que se han posicionado en contra de la Ley de Partidos, no consideren para nada nulos los votos de ANV. Sí tenemos esperanza de poder representar a la sociedad más allá de lo que nos quieren limitar.

¿Qué respuesta esperan obtener el día 27?

Vemos la posibilidad de tener representación en muchas instituciones. Creo que habrá una respuesta masiva, y creo también que existe un cansancio en la base de partidos que se dicen de izquierdas, o que se dicen abertzales, y que después ni hacen política de izquierdas ni hacen política en clave abertzale. Opino que vamos a ser un referente, no sólo para la gente a la que han impedido votar a otras opciones de izquierda y abertzale, sino también para aquellos que tienen un voto tradicional para determinadas siglas y que ya están cansados de ver el fraude que suponen.