El Ayuntamiento de Ondarroa no se constituyó tras las ausencia de casi todos los ediles, y ahora se baraja la opción de crear una gestora que incluya a la izquierda abertzale, a la que corresponde la Alcaldía y siete electos. Javier Madrazo, líder de EB, dijo ayer que lo ve «precipitado» y vinculó las renuncias a cargos de sus compañeros a «la terrible presión que sufren».