El presidente de Tubos Reunidos, Pedro Abásolo, junto al consejero delegado, Javier Déniz, reconoció que la empresa atravie- sa por el mejor momento de los 117 años de historia. Presentó unos resultados económicos récord en 2006. En el primer semestre de este año cerrará con un beneficio neto de 45 millones, un 50% más que en el mismo período de un año antes.

La tendencia positiva se va a mantener durante los próximos años, por lo que Abásolo aseguró que la situación financiera es positiva y cuenta con una disponibilidad de 500 millones para «crecer» y «entrar en el grupo de los líderes mundiales».

Aunque no quiso anticipar qué método empleará para crecer -la compra, la fusión o la implantación en otro país-, el presidente anticipó que, «sea lo que sea, tiene que producirse durante este año».

Facturación extraordinaria

El grupo, que tiene su sede en Amurrio, facturó en 2006 un total de 585,6 millones y alcanzó un resultado positivo de 60,4 millones de beneficio, casi el doble que un año antes.

Abásolo explicó que los planes de desarrollo de la actividad industrial han dado resultado «por anticipado» y precisó que «el grupo está renovado a nivel industrial» para acometer el futuro sobre el que ya están trabajando. La empresa tubera ya baraja la producción por encima de las 320.000 toneladas. «Hemos invertido muchos recursos en la especialización de los productos y nos ha dado resultado. El futuro es positivo, porque todo lo que tiene que ver con la generación energética nos beneficia», señaló.

Por otro lado, la sección sindical de ELA denunció la paralización de la bolsa de eventuales y el contrato de relevo. La Inspección de Trabajo declaró en mayo «fraude de ley la aplicación de dos artículos del convenio colectivo 2005-08, firmado entre la dirección, UGT, CCOO y la lista de Veteranos de Tubos Reunidos, a los períodos de formación y adaptación al personal eventual por circustancias de la producción».

Según ELA, el inspector los considera «discriminatorios, porque los trabajadores que se incorporan iban a cobrar unas retribuciones inferiores». Debido a esa resolución, la dirección ha paralizado las contrataciones y ha anunciado que les aplicará directamente el salario mínimo interprofesional.