Rice advierte a Siria sobre la seguridad del tribunal Hariri
La secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, advirtió ayer desde París a Siria de que el tribunal internacional que debe establecerse, a instancias de la ONU, para juzgar a los responsables materiales e intelectuales del atentado que costó la vida al ex primer ministro libanés Rafic Hariri y a otras 22 personas debe trabajar de forma segura. Para garantizar dicha seguridad, Rice explicó que es necesario «sacar a relucir» el problema de «la intimidación y el tipo de asesinatos (políticos) que han tenido lugar en Líbano» en los dos últimos años.
Por su parte, el primer ministro libanés, Fuad Siniora, en la misma comparecencia de París, admitió que la frontera que su país tiene con Siria es objeto de contrabando de armas y de personas armadas que se pueden infiltrar en su territorio, haciéndose eco de la denuncia realizada por un informe de la ONU. Siniora añadió que la topografía «no es sencilla» y aunque reconoció que la responsabilidad es de ambos países, apuntó que el Ejército libanés tienen una capacidad «limitada» que hace difícil ese control.
En otro orden de cosas, su ministro de Defensa, Elias Murr, señaló que alrededor de 300 milicianos islamistas de Fatah al-Islam han muerto o resultado heridos durante las cinco semanas de combates con el Ejército libanés en el campo de refugiados de Nahr al-Bared, y cifró en medio centenar los que permanecen activos en su interior.