Maite SOROA
¡Cómo le aplauden a Imaz!... en Extremadura
Está resultando muy curioso comprobar de dónde le llueven los pitos y de dónde los aplausos a J.J. Imaz por sus últimas «revelaciones» sobre el desarrollo y final de las conversaciones a tres bandas entre Batasuna, PNV y PSE. En «El Periódico» de Extremadura no ahorraban palmas: «las últimas manifestaciones realizadas por el presidente del Partido Nacionalista Vasco, Josu Jon Imaz, sobre las causas por las que se ha puesto punto y final al proceso de diálogo para acabar con la violencia de ETA tienen, al menos, dos puntos de interés: el de aportar, por un lado, información sobre cómo fueron las conversaciones políticas exploratorias entre ambas partes y, por otro, de poner la pelota en el tejado que corresponde». No saben, los pobres, lo alejados que están de la realidad. Física e intelectualmente.
Según el editorialista de tan lejano rotativo, «lo que, con gran claridad, viene a confirmar Imaz es que el descarrilamiento del proceso se produjo por culpa de ETA, cuando transmitió a través de Batasuna que los socialistas debían pasar por asumir que Euskadi y Navarra tenían que integrarse `en un solo espacio de autogobierno'. Es decir, los terroristas hicieron una exigencia política que no podían de ningún modo, ni debían, admitir los socialistas». Y ahí está el alborozo del editorialista, debidamente tranquilizado por Imaz. Y es que gracias al PNV, los sociatas españoles pueden proclamar a los cuatro vientos que «es una confirmación más de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no cedió al chantaje en un asunto tan delicado.
Las insinuaciones del Partido Popular sobre Navarra carecían, por tanto, de sentido y, vistas ahora a la luz de las declaraciones del dirigente peneuvista, bien podrían obedecer a una táctica encaminada a deslegitimar el posible pacto, a futuro, de los socialistas navarros con la coalición nacionalista Nafarroa Bai. No es casualidad que las declaraciones de Imaz se produzcan justo en el tira y afloja final para saber si será Unión del Pueblo Navarro (UPN), la marca del PP en la comunidad foral, la que gobierne Navarra o serán el Partido Socialista Navarro con el apoyo de los nacionalistas».
Pero incluso a tan conspicuo zapaterista le llama la atención lo que a nadie se le escapa: «No deja, por otra parte, de sorprender que sea el presidente del PNV quien haya hecho unas revelaciones que clarifican enormemente el porqué del fracaso del intento de paz. Parece más normal que hubiera sido el Gobierno quien informara de que hubo durante el otoño pasado reuniones a tres bandas entre PSE, PNV y Batasuna para preparar la mesa de negociación política de partidos y que ETA se interpuso en esas conversaciones para tratar de imponer, antes de entregar las armas, sus tesis panvasquistas». Y ahora viene lo más grosero: el ignorante se hace el enterado. Y dice así que «Ese silencio ha dado alas a sus adversarios, que no han dudado en ventilar la versión interesada de Gara, el periódico de la izquierda aberzale que se comporta como una especie de `brazo informativo' de ETA puesto que no condena sus crímenes. Imaz estuvo acertado al decir que Gara vende una versión del final de la tregua que sólo busca justificar a ETA ante su parroquia». Podía pensar también que GARA dijo la verdad. ¿Qué harán cuando las actas salgan a la luz?