El presidente de la Confederación empresarial de Bizkaia, José María Vázquez Eguskiza reconoció ayer la «paralización de la negociación colectiva, aunque rechazó que esto haya supuesto una pérdida de poder adqusitivo. «Admitimos la paralización de la negociación colectiva, pero no admitimos que se haya producido una depreciación en relación al coste de la vida, porque la recomendación que se hace, que es generalmente seguida por los trabajadores, es una recomendación suficiente o más para corregir este efeto del IPC», aseguró en una entrevista concedida a Radio Euskadi.

Indicó, asimismo, que la patronal tiene «clarísimo» la «imposibilidad» de reducir el número de horas de trabajo «porque nos colocaría en una posición de no competitividad» y señaló que ha quedado «completamente aparcada» la idea de que reducir horas de trabajo permitía repartir trabajo «porque la cantidad de trabajo no es fija ni las capacidades de las personas son iguales».

Subrayó que «lo correcto y lo prudente» sería conseguir unos cauces «bien engrasados y bien establecidos» entre las organizaciones empresariales y sindicales para responder a los tiempos de crisis, aunque tildó de «superfluo» alguno de los órganos, en referencia al Consejo de Relaciones Laborales (CRL) y al Consejo Economico y Social (CES). Afirmó que el CRL debería existir «solamente» en su apartado de arreglo de conflictos, «pero bajo una normativa distinta que impida los bloqueos». «Además, estos organismos hoy en día no se echan en falta porque nos vamos arreglando, pero cuando las cosas no sean así, es evidente que hacen falta sitios de encuentro», subrayó.

Avanzó que en las próximas semanas o en los próximos meses «perfectamente» podrían darse por cerradas otras negociaciones.

Vázquez Eguskiza aseguró que la CAV cuenta con proyectos «interesantes» en sectores como el de las biotecnologías, aunque reocnoció que hay que «recuperar mucho tiempo» en relación con los competidores.

Respecto al Impuesto de Sociedades, consideró que en Gipuzkoa «no disponer de un referente en el Impuesto de Sociedades es algo que crea inseguridad jurídico mercantil».

En cuanto al crecimiento de la economía, auguró que oscilará entre «un 3,8% o 4%» y apuntó que la CAV «está cogiendo bien la onda industrial», de la innovación tecnológica, la colaboración y la deslocalización «de aquellas cosas que se tienen que deslocalizar». «Además -prosiguió-, existe una gran demanda en los mercados que tradicionalmente exportan y estamos disfrutando de altos niveles de inversión pública en las estructuras y en vivienda».