T-MOBILE Un par de horas separaron una situación ideal con Gerdemann de amarillo y Rogers escapado a perder tres corredores al instante
Entre la gloria y el drama tras elegir un nuevo camino
Valerio Piva, el nuevo director del equipo, trasmite tranquilidad por la evolución de Sinkewitz y esperanza en la renovación emprendida tras los casos de dopaje
Joseba ITURRIA | ENVIADO ESPECIAL
Si hay un equipo que ha conocido la estrecha frontera que separa la gloria del drama es el T- Mobile. En Le Grand Bornand todo era felicidad tras el triunfo de etapa y el maillot amarillo de su promesa Linus Gerdemann. Al día siguiente todo marchaba mejor incluso con el líder del equipo Michael Rogers escapado y el de la carrera cómodo en el pelotón, pero en unas pocas horas todo cambió. El australiano cayó y y tuvo que verse obligado a la retirada, el sprinter del equipo, Mark Cavendish, quedaba fuera de la carrera y al término de la etapa Patrick Sinkewitz sufría un grave accidente en el que se temió por su vida y la del espectador con el que chocó.
Era un drama ver las caras de los miembros del T-Mobile conforme llegaban el domingo al hotel de Val d'Isere. Se temía lo peor y por fortuna los dos están fuera de peligro. Según explicaba ayer a GARA el director del equipo Valerio Piva, «teníamos miedo por el futuro de su carrera deportiva, pero el lunes por la tarde volvió a Alemania. Sufre fracturas en la nariz y en la mandíbula, tiene también mal una pierna, padece los lógicos traumatismos, pero lo importante es que no hay problemas con su cabeza y todo ha vuelto a la normalidad. Aunque va a necesitar tiempo para recuperarse para la competición, pienso que podrá hacerlo con normalidad. Su vida no corre peligro, era el problema porque en el primer momento se pensaba que tenía problemas más graves».
No acompaña la suerte al equipo en los últimos días, de hecho ayer Marcus Burghardt era protagonista de otro accidente al caerse tras romper su rueda delantera al chocar con un perro que cruzó la carretera: «Es la vida -se resigna el máximo responsable del equipo-. En el Tour en cada curva hay un peligro y debes estar siempre muy atento. Y contra la mala suerte no se puede hacer nada. Habíamos interpretado la carrera de manera magnífica, con Michael metido en la escapada ideal, podía coger tiempo a los demás favoritos e incluso vestir el maillot amarillo, pero es así la carrera. Una caída del corredor que va delante tuyo forma parte de la carrera, pero es una mala suerte para él y para el equipo».
Porque a pesar del buen comienzo de Gerdemann, Rogers era el líder claro del equipo tras acabar los dos últimos años entre los diez primeros. El triple campeón mundial contrarreloj esperaba meterse entre los cinco mejores en París y era el encargado de hacer buena la apuesta por un nuevo camino de los dirigentes de T-Mobile, que han cambiado a todos los responsables del equipo y a todos los corredores implicados en la práctica de dopaje.
Trabajar con jóvenes
El italiano Valerio Piva ha sido elegido como primer director del equipo y explica que «desde el comienzo de temporada trabajamos con un grupo de jóvenes que tienen mucho talento. Es importante elegir buenos corredores, con calidad, y cuando se trabaja bien los resultados llegan. Nuestro objetivo en el futuro es continuar así. Espero que todo el mundo siga esta línea porque es necesario en nuestro deporte recuperar la confianza del público y del sponsor. Si no, el futuro del ciclismo es muy difícil».
T-Mobile ha querido cambiar para convertirse en un embajador del ciclismo limpio y para demostrarlo expulsó este año a Sergei Gonchar del equipo tras un control interno. De hecho, las declaraciones de Gerdemann tras su victoria, en la que se felicitaba por demostrar que se puede ganar sin necesidad de doparse, iban en esa línea.
Dentro de ese mensaje, Piva comenta que «todos sabemos los problemas que ha habido en Alemania, hay que recuperar la confianza de los medios y del público. Lo que ha pasado no es bueno, pero tenemos una oportunidad y no podemos perderla. Estamos bien y los corredores marchan bien. Hemos perdido a nuestro líder, pero tenemos a Linus, que está bien situado y que si no llega a estar Alberto Contador podía pensar en el maillot blanco, que era el objetivo que nos marcábamos al inicio de la carrera para él. Además Kirchen está en buena condición y quizás puede aspirar a lograr un triunfo de etapa. Desde ahora el objetivo es conseguir un segundo triunfo parcial».
La actuación de su joven corredor ha llevado a confirmarle como una de las esperanzas alemanas, pero Piva pide paciencia: «Es necesario esperar y darle tiempo, conseguir que mantenga los pies en el suelo. No podemos cometer errores como en el pasado. Tiene talento y quizás podrá ganar en el futuro el Tour, pero para eso debe trabajar y coger experiencia. Es necesario correr el Tour varias ediciones, esperar y trabajar mucho».
Dar confianza a los aficionados
Dentro de la lectura positiva que se hace desde el equipo T-Mobile, con las incógnitas que había sobre la respuesta del público tras los escándalos de dopaje que han acaparado la atención todo el año, se destaca la gran cantidad de alemanes que se han acercado a los Alpes para seguir la carrera en directo.
«Pienso que hay mucha gente que ama el ciclismo y está detrás del equipo. Por eso debemos trabajar y darles confianza Es la mejor manera de recuperar el feeling con los aficionados y con el sponsor. Lo he visto en el Tour, pero también en otras carreras, que hay mucha gente que sigue el ciclismo», dice Piva.
«Teníamos miedo por el futuro de su carrera deportiva, pero el lunes por la tarde volvió a Alemania. Tiene fracturas en la nariz y en la mandíbula, pero lo importante es que no hay problemas en la cabeza y todo vuelve a su cauce».
«Es necesario esperar y darle tiempo, conseguir que mantenga los pies en el suelo. No podemos cometer errores como en el pasado. Tiene talento y quizás podrá ganar el Tour, pero para eso debe trabajar y coger experiencia».
Una de las bajas de última hora para el Tour ha sido la del italiano Giusseppe Guerini, el corredor que más años lleva en el equipo y que quedará para la historia por su caída antes de ganar en Alpe d'Huez. Valerio Piva confirma que dentro de la línea de renovación que lleva el equipo, que se va a reforzar este año, Guerini no seguirá.
Sobre su ausencia en el Tour, Piva señala «que tiene un problema en el estómago desde hace años y los médicos no veían que podía aguantar el que podía ser su último Tour. En la Vuelta a Alemania esperamos que volverá a competir». J.ITURRIA