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Pain of Salvation y Pendragon, nombres claves de Minnuendö

Van ya cuatro ediciones para uno de los festivales más originales de toda nuestra geografía, Minnuendö. Encuentro que se celebra en la localidad navarra de Azkoien y que, en esta ocasión, cuenta con la presencia de Psicotropia, los veteranos Pendragon y Pain of Salvation.

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Pablo CABEZA | BILBO

La asociación cultural Minnuendö comenzó con agitación su primer festival. Lo hacía en un pueblo de menos de 5.000 habitantes, sin experiencia previa en producciones y orientándolo hacia el rock progresivo y sinfónico, sonidos que el río Arga nunca había escuchado en su ruidosa vida, si acaso algún concierto de los iruindarras 2112, nombre que toman en homenaje a una de las bandas más populares del rock progresivo, el grupo Rush.

Jesús Ezpeleta, uno de los miembros de la asociación, recuerda aquéllos primeros días. «Como es lógico, la primera edición fue en la que más nervios y miedos teníamos, ya que pasamos de ser espectadores a organizar un festival. Para colmo nos cayó una gran tormenta y se nos vino el mundo encima. No obstante, tuvimos suerte y todo salió bien. Agobios en realidad no tenemos, pues al ser un festival especializado y para un público no mayoritario, no nos preocupan tanto los grandes números. Con todo, este año pensamos que va a ser el que más gente vamos a tener».

La previsión indica que Pain of Salvation pueden batir el récord de asistencia, pues es una formación de metal progresivo que cuenta con una buena lista de seguidores. Los suecos presentan «Scarsick», publicado este mismo año. Pain of Salvation vienen funcionando desde el inicio de la década de los noventa. Están liderados por Daniel Gildenlöw, quien a los 11 años ya había montado su primera banda, Reality. El primer álbum llega en 1977, «Entropia». Desde entonces han grabado seis discos más, con «BE» y «Scarsick» como títulos de mayor repercusión. Los rasgos del cuarteto se centran en el poder de las guitarras, las diferentes tonalidades que crean los tiempos lentos y los rítmicos, y los cambios abruptos cargados de sugerencia. Pain of Salvation también investigan en poliritmias y picoteos en estilos alejados de su credo.

La otra bestia progresiva de la noche se llama Pendragon, una banda dirigida a un público más veterano y quizá menos dado al movimiento. «Pendragon es un icono del rock progresivo de los ochenta, junto a Marillion -apunta Jesús-. La banda realizará un repaso a sus 25 años de existencia desde el que fue su disco debut, `The jewel'. En la actualidad presentan `Believe'». Tras el concierto, el grupo liderado por el espectacular guitarrista Nick Barret viajará hasta Alemania, ya que al día siguiente actúan junto a Fish, Asia, Je-thro Tull... Vamos, con los grandes nombres. La noche la abrirán Psicotropia, un trío madrileño surgido en 1999. Música vanguardista, experimental, en onda King Crimson.

Finalmente, le cuestionamos a Ezpeleta qué grupos le gustaría traer si contase con un presupuesto mayor. «Hemos llegado a hablar con grandes como Roger Hodgson o Steve Hackett, pero no pudo ser. Nuestro presupuesto es pequeño, pero estamos contentos con lo logrado. También nos gustaría traer a Uriah Heep, Yes, Kansas... o más actuales como Dream Theater o Porcupine Tree».

Los grupos progresivos son más naturales

Ya sabemos que los músicos tienden a interiorizar rarezas cuando no caprichos, aunque quizá en formaciones no comerciales, envueltos en ambientaciones cargadas de romanticismo, las cosas pueden ser diferentes. Jesús Ezpeleta apunta que nadie fue extravagante ni solicitó tonterías de engreído en los cuatro años del festival, pero sí existen pequeñas y curiosas anécdotas. Así, Thijs Van Leer, teclista de Focus, se dio un paseíto por Iruñea y revivió recuerdos de cuando tocó en la Plaza de Toros con el Rock'n'Ríos, el show y gira de Miguel Ríos. También se llevó una txapela. «Quidam -señala- son para nosotros como de la familia. Este otoño pasado estuvieron una semana en nuestro pueblo tocando y componiendo canciones. Los más exigentes quizá hayan sido Arena, son muy perfeccionistas, pero realmente encantadores. La cantante de Mostly Autumn y el cantante de Quidam son unos enamorados del vino. Además, Heater (Mostly Autumn), cuando subíamos de Bilbao a Peralta, nos hizo parar para ver las viñas, pues nunca había visto de dónde procedía el vino. Los suecos A.C.T. descubrieron las pipas. El batería de Focus quería comer algo típico y, para nuestro asombro, pidió dos huevos fritos».

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