La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) dictó el pasado 6 de julio una sentencia en la que declara nula la ampliación de la cantera mañariarra de Zallobenta en un nuevo frente hasta la cota 575 del monte Eskubaratz dentro del Parque Natural de Urkiola. Al anularse esta concesión del 24 de febrero de 2004 de la Dirección de Minas de Lakua, según el colectivo Mañaria Bizirik, «la cantera se queda sin autorización administrativa alguna, es decir, en una situación absolutamente ilegal».

Los vecinos optaron en enero de 2006 por la vía de la justicia ordinaria, después de que el Gobierno de Gasteiz desestimase en dos ocasiones las alegaciones presentadas por alrededor de 210 mañariarras y más de 3.000 habitantes de Durangaldea contra la polémica concesión.

Precisamente, la autorización administrativa para ampliar la extracción en Zallobenta se produjo meses antes de que el propio Gabinete de Lakua aprobase el documento definitivo del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de Urkiola, un instrumento básico de gestión de un espacio protegido de 5.768 hectáreas, que abarca los términos municipales de Abadiño, Atxondo, Dima, Durango, Izurtza, Mañaria y Zornotza, en Bizkaia, y el alavés de Aramaio. El cambio más sustancial incluido en el plan -con vigencia hasta 2009- fue la reducción de los límites de explotación de las múltiples canteras que amenazan el parque.

Esta última sentencia no es el único revés judicial que han recibido la empresa Canteras y Hormigones Zalloventa, ya que la autorización administrativa con la que extrajó piedra caliza desde 1998 hasta la reclasificación de 2004 también fue anulada en 2001 por el TSJPV, en primera instancia, y ratificada cuatro años después por el Tribunal Supremo español.

La empresa explota la cantera gracias a un proyecto aprobado en marzo de 1998 por el Departamento de Industria del Gobierno de Gasteiz, en el que se incluía un plan de restauración de obligado cumplimiento. Mañaria Bizirik denuncia que «a fecha de hoy se han explotado muchos más recursos que los planteados en el proyecto de explotación, modificándolo sustancialmente, y ninguna labor de restauración prevista en el proyecto se ha realizado».

Después de «tres sentencias declarando nulas todas las autorizaciones, graves irregularidades en la explotación, nulo compromiso de recuperación, daños de carácter irreversible en el entorno y ningún respeto hacia las personas que queremos seguir viviendo aquí y disfrutando de este entorno que es de todas y para todas», los opositores le preguntan a Lakua «qué más necesita para poner fin a esta injustificada situación».

En juego el futuro del pueblo

Mañaria Bizirik subraya que el futuro del pueblo está en juego como consecuencia de las repetidas irregularidades en las canteras. Por ello, su batalla jurídica y movilización ciudadana para paralizar la ampliación de la explotación de Zallobenta en las faldas de Eskubaratz. Este organismo estima que la última resolución del TSJPV no hace sino reconocer su labor, «no es un sinsentido lo que planteamos», inciden satisfechos por esta sentencia.

El colectivo se pregunta ahora si «tenían razón en el servicio de Minas del Departamento de Industria del Gobierno Vasco, cuando nos decían que era mejor que vendiéramos nuestras tierras y nuestras casas, que poco podríamos hacer para frenar lo que en Mañaria estaba ocurriendo».

Pero no es sólo a Lakua a quien critican, también al Consistorio mañariarra, por aprobar las actuales normas subsidiarias. Desde el organismo vecinal denuncian que mientras el área residencial (suelo urbano, suelo apto para urbanizar y suelo no urbanizable o rural) abarca una superficie de 26,39 hectáreas, la extensión asignada por el Ayuntamiento -controlado por el PNV- para el Plan Especial de Canteras es de 54,10 hectáreas; es decir, más del doble.

«Algunos quieren que Mañaria sea una gran cantera. El pueblo no importa -remarcan-, el patrimonio histórico y natural que le rodea tampoco, el respeto hacia las personas que lo habitamos tampoco».