El nuevo representante ruso para Kosovo quiere «una negociación sin plazos»
GARA |
Rusia nombró ayer como su representante en el Grupo de Contacto para Kosovo a Aleksandr Bostan-Jarchenko, hasta ahora enviado especial del Ministerio de Exteriores a los Balcanes.
«Rusia se unirá a EEUU y la UE en el Grupo de Contacto, que fue creado para la búsqueda de un acuerdo entre Belgrado y Pristina», aseguró Mijail Kaminin, portavoz de la Cancillería rusa, citado por agencias de ese país.
El funcionario ruso insistió en que el proceso de negociación sobre Kosovo debe estar amparado por el Consejo de Seguridad de la ONU, en la que Moscú dispone de capacidad de veto ante cualquier resolución.
Rusia considera que el Grupo de Contacto debe estudiar la propuesta de Belgrado de poner en práctica la resolución 1.244 en lo que se refiere a la garantía de los derechos de las minorías -básicamente la serbia- en Kosovo.
Además, Kaminin subrayó la necesidad de «excluir» de futuras negociaciones los plazos establecidos por el plan de Martti Ahtisaari, cuyas cláusulas Rusia considera «incompatibles» con el logro de un compromiso entre las partes en conflicto.
Rusia, quien rechazó en la ONU, una tras otra, las propuestas de resolución presentadas por EEUU y la UE, es partidaria de una decisión consensuada entre serbios y kosovares. Esta solución, a priori, parece extremadamente complicada, puesto que Belgrado no quiere ni oír hablar de la independencia de «una parte indisoluble de Serbia», mientras que para Pristina, es una condición indispensable lograr un Estado independiente.
120 días para el acuerdo
El jefe de la diplomacia de la UE, Javier Solana, nombró el domingo al diplomático alemán Wolfgang Ischinger representante de la UE en el Grupo de Contacto. En un principio, el Grupo de Contacto tiene 120 días para intentar alcanzar un acuerdo sobre el futuro estatus de Kosovo, aunque Rusia no está de acuerdo con esta cláusula. Esa fórmula fue elegida después de que el pasado 20 de julio los países europeos miembros del Consejo de Seguridad de la ONU y EEUU desistieran de someter a votación una resolución que preveía la reapertura de las negociaciones.
Los líderes kosovares han confirmado su participación en un nuevo ciclo negociador sobre el futuro estatus de la provincia actualmente administrada por la ONU, pero recalcaron que no renunciarán a la independencia.
El presidente kosovar, Fatmir Sejdiu, advirtió de que no aceptarán nuevos aplazamientos y que están dispuestos a declarar la independencia.