Unas 2.000 mujeres muestran su apoyo a los líderes de la Mezquita Roja paquistaní
GARA |
Unas 2.000 mujeres de los partidos islamistas más radicales de Pakistán salieron ayer a la calle para manifestarse en Islamabad en apoyo de los antiguos líderes de la Mezquita Roja. Uno de ellos se encuentra detenido y el otro falleció durante el asedio y posterior asalto del templo que el Ejército protagonizó hace dos semanas.
Las manifestantes se congregaron en las inmediaciones de la mezquita Faisal para exigir al Gobierno el endurecimiento de las leyes islámicas de Pakistán.
Al menos 102 personas, según los islamistas de la Mezquita Roja, y unas 70, según el Ejecutivo, murieron en el asedio de las fuerzas de seguridad en el templo y en la madrasa adyacente, después de que uno de sus líderes, Abdul Rashid Ghazi, y sus colaboradores se amotinaran y se negaran a deponer las armas. «La sangre de los mártires de la Mezquita Roja no será en vano», gritaban las mujeres.
Qazi Hussain Ahmed, presidente del principal partido paquistaní, Jamaat-e-Islami Pakistan, prometió a la multitud que su formación construirá nuevos seminarios para reubicar uno de los que se impartían en la Mezquita Roja.
Por otra parte, un grupo de milicianos se hizo el lunes con el control del santuario islámico de Sahib Turangzai y la mezquita adjunta, en la región tribal de Mohmand, y la rebautizaron con el nombre de Mezquita Roja.
Combates en Waziristán
El Ejército paquistaní, por su parte, mató ayer a al menos 18 combatientes islamistas tras seis horas de intensos combates en el área bajo control tribal junto a la frontera con Afganistán.
Los enfrentamientos comenzaron a primera hora del día, cuando una patrulla militar fue respondida con una lluvia de balas después de hacer detenerse a tres vehículos en un control situado en una carretera de Waziristán del Norte, en plena zona en la que las fuerzas de seguridad y militantes pro talibán se enfrentan habitualmente, según señaló a France Presse el general Waheed Arshad.
«Los impíos (nombre que los militares paquistaníes dan a los combatientes islamistas) comenzaron a disparar contra las fuerzas de seguridad y tomaron posiciones en las montañas que rodean la carretera antes de que los militares pudieran responder», añadió el general Arshad, que destacó que un helicóptero se desplazó al lugar de los hechos para ayudar a los militares.
«Dieciocho impíos han fallecido y sus cuerpos están en nuestro poder, al igual que los heridos y los detenidos», subrayó el general Arshad, que destacó que sólo dos militares resultaron heridos.
No lejos de ellos, cuatro paramilitares que colaboraban con el Ejército en las zonas tribales fueron secuestrados por supuestos combatientes islamistas en la ciudad de Ghandouri, según informó el Ejército.
Sin salir de Waziristán del Norte, los soldados mantuvieron otro enfrentamiento con islamistas después de que lanzaran un cohete contra un edificio público de Miranshah.